La esencia de la nación cubana no puede explicarse si no es desde la muy estrecha relación entre la política y la cultura, entre su defensa desde las trincheras hasta su defensa desde las ideas y el arte.
Baste citar como ejemplo el del más universal de todos los cubanos: José Martí, designado con todo derecho nuestro más brillante político y Héroe Nacional y designado también, con igual derecho, nuestro más excelso poeta, escritor y periodista.
Hago este preámbulo no solo porque un hecho vinculado a su figura se encuentra a muy escasos días de celebrarse, el asalto a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes el próximo 26 de Julio, sino porque, en los ámbitos del arte y la cultura, resulta imposible pasar por alto un acontecimiento histórico de esta trascendencia.
Para exponer con acierto esta combinación en escena se ha escogido a una figura que ya probó con intensidad su talento dentro y fuera de Cuba: Jonnie Martínez Nieves, coreógrafo y director de la compañía NC Dance en Caimito, sede provincial de los actos por el 26.
Organizar un acto donde se equilibre el mensaje político y el cultural y no resulte más de lo mismo, no es tarea fácil, requiere ensayos fuertes, vista larga, capacidad para realizar una selección adecuada y equilibrada de lo que habrá de subir a escena.
Cuando no se busca ese equilibrio, o cuando no se le encuentre aunque se haya buscado, cuando no se sazona con rigor y novedad la propuesta, a tono con los requerimientos de la fecha a la cual pretende rendir homenaje, falla toda la intención de quienes trataron de regalar un mensaje profundo y poético al público presente.
En la provincia nuestra, Jonnie Martínez Nieves resultó el artista ideal, para asumir la dirección general de este acto el próximo 23 de julio, en horas de la mañana, cuando Caimito sirva como sede de recordación al Moncada y a sus jóvenes asaltantes, entre ellos unos 40 hijos de estas tierras.
Pero, ¿qué piensa del acto y cómo lo ha concebido el aún muy joven coreógrafo? Jonnie nos responde de inmediato: “Lo primero que quiero decirte es que la dirección de este tipo de acto no es obra de una sola persona, sino de un equipo de trabajo. Sin ese equipo, no soy nada. Lo segundo es la preponderancia de artistas artemiseños dentro del espectáculo que haremos esa mañana. Hemos priorizado a creadores de la provincia, y es una decisión, a mi entender, muy positiva”.
El acto ha sido concebido para tres momentos: uno abarca desde nuestras gestas de independencia contra la esclavitud hasta los días de hoy; un segundo momento rinde homenaje a la tierra artemiseña, y un tercero se lo rinde al Líder del asalto y de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz, y a su legado para las nuevas generaciones de compatriotas.
La compañía NC Dance llevará a escena las piezas Canto a Oggún, del profesor Leonel Méndez, Estampas guajiras y Canto y victoria, creaciones de Johnnie Martínez Nieves.
A ello se sumará la conducción de Danielys Carmenate y la banda de Guanajay, quienes apoyarán musicalmente a las vocalistas Yara Véliz, Yelinett Martínez Véliz y Giselle de la Caridad García Torres, mientras que Sisto y su grupo Kolao actuarán junto a un coro de voces infantiles, y Son Artemisa con la intérprete Yosleidis estrenarán el tema En el pecho de Artemisa, dedicado al 26 de Julio y con autoría de Orlando Benítez.
Dos poetas de fibra, Héctor Montesinos y Yovani León, acompañados por Son Artemiseño, pondrán el máximo de lirismo al verso improvisado, el actor y declamador Ramón Junco será un invitado especial, así como las actrices Nachy Valle y su hija Mía Rodríguez.
Caimito, municipio donde el trabajo cultural dentro de las comunidades ha sido muy destacado, tendrá el gusto de poner en acción a los proyectos Arte Vivo, Chiquilinas y el de danza de la Casa de Cultura Raquel Revuelta, así como a los miembros del taller de formación de la compañía NC Dance.
“La interacción entre todos los artistas invitados, su fusión en uno solo, ha sido realmente hermosa”,
asegura Johnnie.
Interrogado sobre la seriedad con que puede tomarse un acto de este tipo, a quien ha subido las más diversas obras a escenarios de varias naciones del mundo, entre ellas México, Perú, Turquía y Alemania, responde convencido:
“Yo asumo todos los espectáculos, absolutamente todos, con total entrega y responsabilidad, trato de que el valor estético prime y viaje acorde con los tiempos. Para esta ocasión he recibido el apoyo incondicional del gobierno y el Partido en la provincia y de la dirección municipal de Cultura. Es por ese motivo, además de un placer, una responsabilidad muy seria”.
Si a las Revoluciones del 68 y el 95 no le faltaron poetas de tan fina lira como Céspedes y Martí, a la del 30 no le faltó un memorable Villena, y el Moncada, motivación perfecta para este acto, también tuvo los suyos: Raúl Gómez García, autor de Ya estamos en combate, y Agustín Díaz Cartaya, autor del Himno del 26. Definitivamente, política y cultura son ramas y raíces del mismo árbol en la nación cubana.