Yuniel González Paneque, de la Cooperativa de Créditos y Servicios Reinaldo Pérez, en San Antonio de los Baños, se convirtió en el primer ganadero de Artemisa, en materializar la Resolución 139/2021, que regula el sacrificio, consumo y comercialización de las carnes de ganado bovino.
El productor, vanguardia nacional en la actividad ganadera, mantiene la tradición de un crecimiento en el rebaño, cumple sus planes de entrega al balance nacional y no posee faltantes en el ganado, requisitos necesarios para el autorizo ante la solicitud de sacrificio.
La primera acción del joven vaquero resultó el donativo de un toro al Hospital General Docente Iván Portuondo, para ayudar a la dieta alimenticia de los pacientes, gesto que habla de su sensibilidad y humanismo.
Orlando López, administrador de la entidad de salud, agradeció a nombre de los trabajadores, y reconoció la disposición del Estado de modificar la comercialización del ganado bovino, en un momento tan complejo para la economía cubana, fuertemente golpeada por el cerco económico, comercial y financiero de los Estados Unidos.
“Con la venta que iniciamos hoy en San Antonio y que pronto se extenderá a otros ganaderos de la provincia, se concreta un viejo anhelo de los productores agropecuarios cubanos, que beneficia al pueblo y estimula el incremento de la masa animal” mencionó González Paneque.
Ya en el MAE, consumidores como Herminio Hernández, quedaron satisfechos con el modo en que se organizó la venta de la mercancía, previamente envasadas en bolsas, a razón de cinco libras por consumidor, lo cual facilitó organización y rapidez.
Los precios también fueron razonables y acorde con el poder adquisitivo de la mayoría: 300 pesos las bolsas de carne limpia, 200 la de víceras y 150 la de costillas.
Otros productores de la provincia que cumplen con los requisitos, entre ellos el crecimiento del rebaño en la categoría vaca, se alistan para llevar a tarima el demandado alimento.