A sus 74 años la artemiseña Aida Orta Rivero ni siquiera piensa en la posibilidad de detenerse. Se jubiló como cocinera en el Hogar del Adulto Mayor Fidel Labrador del municipio cabecera, y además de su chequera vela por el bienestar de otra anciana, lo cual representa un ingreso extra para quien estaría en condiciones de recibir cuidados.
Luego del retiro, el anuncio del integrante del Buró Político Manuel Marrero Cruz, Primer Ministro de la República, en las sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular en julio último reanimó su esperanza.
“Antes cobraba 1 528 pesos, que no me alcanzaban. Ahora me subieron el doble y puedo comprar los medicamentos de la presión”. Aida reside en el reparto Pablo Torres, ubicado en el consejo popular Eduardo García Lavandero. De manera estratégica acudió el sábado 20 de septiembre a la sucursal 2272 del Banco Popular de Ahorro (BPA), “pues ese día hay menos personas y el proceso resulta rápido”.
Otro de los motivados con la medida es Gilberto Cruz Lezcano, jubilado de la galletería La Kary como jefe de almacén, después de 47 años de trabajo. Devengaba 2 200 pesos y ahora con el incremento llegó a 3 700.
“Por supuesto que me alegró la noticia”, asegura. “Incluso entré directo a cobrar en el Banco de Crédito y Comercio (Bandec), de Artemisa, porque antes las colas eran enormes. Ojalá vinieran futuros aumentos, aunque sé que es difícil, debido a la situación del país”.
Así lo aprecia la mayoría de los interrogados por nuestro equipo, tiempo después de una decisión favorable para más de 40 000 artemiseños con cuantías inferiores a 4 000 pesos incluidos en el régimen general y los regímenes especiales de Seguridad Social, según Evamary Contino Hernández, directora provincial de Trabajo y Seguridad Social.
“El incremento que establece la Resolución 14 de 2025 de nuestro Ministerio se hizo efectivo desde el pago realizado en agosto, que corresponde a septiembre”, precisó. Pero, ¿cómo se ha implementado en la provincia la voluntad gubernamental a favor de estos grupos vulnerables?
Agilidad con alternativas
La buena nueva sin dudas constituyó un reto para todas las instituciones implicadas. El BPA en San Cristóbal no solo abrió los días de pago desde las 7 de la mañana, sino que también aplicó otras medidas que facilitan el proceso.
Solinés Cruz Crespo, directora de la sucursal 1352 agradece a la Dirección de Trabajo y Seguridad Social del municipio por la eficiencia y el acompañamiento, pues todos los días tomaban las cifras de pago y algunas decisiones, luego del procesamiento estadístico, desde una alianza muy favorable.
“Resulta positiva la nueva composición por calendario como forma de pago, a propuesta del Banco Central. Acuden por año de nacimiento y no tienen que hacer las extensas colas de antaño; pasan directamente a la caja.
“Siempre han tenido prioridad, porque hay un cajero que atiende solamente estos menesteres. Además, el banco posee 24 operaciones que se pueden realizar de forma manual, y cuando no hay fluido eléctrico tratamos de continuar siempre con las que se pueda”.

Asimismo, adoptaron otras iniciativas en aras de mejorar el servicio, como la impresión de una nómina electrónica para proseguir con el pago si no hay electricidad. Incluso, han elaborado café en las mañanas e intercambian con ellos sobre este nuevo sistema”.
Sin embargo, Cruz Crespo solicitó paciencia a los jubilados que están en el hogar o encamados, y cobran por medio de gestores pagadores, al menos en la primera etapa. “El incremento ha requerido más tiempo para llevar el dinero a sus casas. Hemos gestionado con las autoridades del municipio y con la Dirección Provincial para aumentar la toma propia o cifra asignada a los gestores pagadores”.
Este cambio en la rutina, debido a una demanda superior de efectivo lo corrobora el gestor Tomás Montalvo Lorenzo. “Atiendo 278 pensionados de dos consejos populares grandes y el pago demoró un poco en agosto. Esperemos que pueda agilizarse para próximos períodos, porque el transporte siempre ha sido un problema, y a eso se suma que con el monto con el cual antes pagaba a cierta cantidad de personas, en la actualidad representa menos”.
Esa última demanda se resolvió, asegura Fanny Barrera Arteaga, subdirectora comercial de la Dirección Provincial de BPA. Además, “en el territorio funcionan cuatro áreas anexas y diez cajas de ahorro, en las cuales se aplican las mismas medidas para agilizar el proceso”.

sucursal de Bandec / Foto: Otoniel Márquez
Bandec y Correos no se quedan detrás
Miguel Abi-Rashed Ríos, director de Bandec
en el territorio, aseguró que disponen del suficiente efectivo para respaldar el dinero de unos 5 000 jubilados, aunque también atienden en sus sucursales otras tarjetas magnéticas.
Al igual que BPA, “abrimos a las siete de la mañana, una hora antes del horario habitual, exclusivamente para estos grupos hasta el mediodía, y los que lleguen en el resto de la jornada también se priorizan, al igual que los sábados”.
Asimismo, “donde existen cajeros automáticos habilitamos uno para la asistencia social, atendido por un especialista del banco”.
Las 11 sucursales tienen grupos electrógenos; sin embargo, los de Caimito y Bahía Honda presentan desperfectos, lo cual no impide mantener los servicios de siempre.
Entretanto, el Consejo de la Administración, la Asamblea Municipal del Poder Popular con sus delegados y las entidades encargadas del pago en San Antonio de los Baños, tomaron cartas en la organización y control del proceso.
En el caso de Correos de Cuba habilitó tres ventanillas y ocho carteros. De acuerdo con Zaiyara Cabrera Góngora, directora general de la Empresa Correos Artemisa, “a cada gestor postal se le asigna un monto de 20 000 pesos para los domicilios, y una vez agotado, regresa a la oficina, recibe la misma cantidad y puede continuar su labor”.
De igual modo, Guelmis Hernández Álvarez, trabajadora de la Unidad Empresarial de Base Correos en Candelaria, apuntó que se han recepcionado inquietudes, sobre todo del grupo de los 1 500 pesos, jubilados pertenecientes a la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana y pensionados por otros conceptos como la viudez.
Así lo expresó el internauta Ángel Linares en una encuesta publicada en nuestro canal en Telegram, quien considera que debió respetarse el incremento previo de 1 528 por el cumplimiento de misión intenacionalista militar; tal vez sin comprender que “son pagos adicionales que se agregan a la pensión de base; no se trata de una remuneración independiente”, aclara la directora provincial de Trabajo y Seguridad Social.
Aplausos para quienes entendieron la urgencia de facilitar la vida de sectores tan humildes y de la tercera edad. No cabe duda de que se puede hacer más, desde la empatía y el compromiso social. Y aunque el aumento todavía se aleje de muchos precios, sí reconoce no pocas canas y aportes al país.
Por Carlos Enrique Rodríguez, Yemmi Valdés, Alexander Acosta y María Caridad Guindo