A su corona y tres medallas en el bádminton, el artemiseño Carlos Raúl Álvarez Izquierdo le suma el orgullo de haber sido elegido el más destacado de la 61 edición de los Juegos Escolares Nacionales, en la categoría de juegos con pelotas.
Es un rey de 12 años, no uno de esos que se acomodan en su trono, sino uno que peleó por el título, con derroche de coraje, confianza en sus propias fuerzas, velocidad y notable agilidad.
Salta como un felino raqueta en mano, vuela de un lado a otro de la cancha, salva una dejada en la red, retrocede al instante para brincar hacia atrás, arquear la espalda, golpear el volante con saña y dirigirlo a la esquina inalcanzable del rival.
Protege sus 34,7 metros cuadrados de territorio en un vaivén de ataque y defensa, de habilidad y estrategia, de reflejos rápidos y movimientos ágiles. Sin embargo, cuando llegó al bádminton, entonces en cuarto grado, realmente ni sabía lo que era.
“El entrenador Camerota fue un día a mi escuela primaria Carlos Rodríguez Careaga, para inscribir nuevos niños; yo los veía jugando, decidí practicarlo y me gustó”.
-¿Cómo te preparas para un torneo?
“La preparación es tanto física como táctica y psicológica. Días antes de la competencia un psicólogo va al área a motivarnos para no sentir presión”.
-¿Y cómo manejas esa presión durante el partido?
“En realidad, no soy de presionarme mucho en los partidos, porque trato siempre de buscar la concentración, relajarme y respirar profundo”.
-¿Cuál es tu mayor fortaleza en la cancha?
“La defensa. Es un factor decisivo. Si elevas el volante tienes que estar preparado para un posible ataque”.
-¿Y tu golpe favorito?
“El clear, un golpeo al fondo que puedes tirar por la paralela o cruzado, para que el contrario no se adapte a una misma posición”.
-¿Estudias a tus oponentes?
“Sí, claro. Antes del partido contra cualquier oponente, hay que estar sentado observando sus técnicas, cómo se desplaza, cuál es su debilidad y su mayor golpeo”.
-¿A quién consideras tu mayor rival?
“A Daniel González, el atleta de Camagüey con quien discutí la medalla de oro en estos Juegos Escolares”.
-¿Hay algún punto que recuerdes especialmente?
“El último en los Escolares, precisamente contra el camagüeyano, cuando me coroné campeón”.
-¿Trabajas actualmente para mejorar alguna técnica?
“El ataque. Debo fortalecerlo, porque define muchos puntos en los partidos”.
-¿Qué te motiva a entrenar cada día?
“Esto mismo que estoy viviendo ahora: las victorias, las medallas, los logros…”
-¿Cómo haces para relajarte y descansar?
“Me gusta escuchar música, ver series y películas deportivas aunque no sean de bádminton, ver fútbol”.
-¿Cuál es la lección más importante que te ha enseñado el bádminton?
“Me ha enseñado mucho: el colectivismo, la disciplina, la constancia, el esfuerzo y el trabajo en equipo”.
-¿Quién es tu modelo a seguir?
“Lin Dan, uno de los mejores jugadores de todos los tiempos: dos veces campeón olímpico y cinco veces campeón mundial. También otros como Víctor Arce, Carolina Marín, Leodannis Martínez y nuestra primera raqueta, Taymara Oropesa, que siempre me ayuda y me corrige los errores”.
-¿Y tu mayor sueño en este deporte?
“El sueño de todo deportista es llegar al equipo nacional, ganar unos Juegos Olímpicos, brindarle muchos logros a mi país y a mi provincia, y que el bádminton en Cuba obtenga grandes resultados”.
