Quince años es poco para quien se ha dedicado, y aún se dedica, al noble arte de enseñar acordes y melodías.
Casi dos décadas han transcurrido desde la creación de Nuevas Liras, orquesta juvenil de guitarras, emblemática de la provincia, dirigida por Valentín Puentes.
Pudiera resultar complejo para cualquier persona resumir lo que significan, para él o ella, quince años; sin embargo, para el maestro de las cuerdas, Nuevas Liras es la realización de un trabajo que se ha tomado muy en serio: la enseñanza de la guitarra.
Comenta que, aunque también lleva de la mano su carrera como músico, nunca ha podido dejar de lado la formación de las futuras generaciones. Afirma que tansmitirles lo que él en algún momento aprendió, verlos lograr sueños dentro o fuera del país, lo llena de orgullo.
«Siento una gran satisfacción al ver a la orquesta arribar a sus 15 años. Es la última generación de jóvenes que tomé desde hace poco más de una década y he podido mantener este trabajo. Algunos permanecen en la orquesta, otros no, pero se mantienen desarrollando su carrera como músicos, y varios persiguen diferentes carreras universitarias. Ha sido un reto que he podido embellecer y escapar de algunos traspiés en el camino», expresa Puentes.
Manifiesta que no han sido pocos los desafíos en este tiempo. El mayor, para él, es mantener la sistematicidad en el trabajo. El amor que sienten los muchachos por la guitarra y saberlos a su lado, ha sido de gran ayuda para enfrentarse a los obstáculos que se presentan.
Sueña con ver a Nuevas Liras como una orquesta profesional y que eso ayudara a la provincia en el plan de desarrollo cultural.
«Si pudiera enviarles un mensaje a los amantes de la guitarra, sería decirles que son bienvenidos, que tienen aquí su oportunidad. Me gustaría que eso sucediera. Aunque el número de las plazas de las matrículas no es amplio, siempre es un placer enseñar», señala.
Casi dos décadas han transcurrido desde la creación de Nuevas Liras y continúa siendo de los orgullos artemiseños, esos que traen trova, poesía y notas musicales.
Quince años es poco para el maestro de las cuerdas, a quien aún le quedan otros 180 meses, y más, para seguir enseñando nuevos acordes a sus Nuevas Liras.