Interesante acercamiento a la cultura japonesa resultó el encuentro celebrado por Aikiterapia PDL en el Museo Municipal de San Cristóbal, en la provincia Artemisa, por estos días.
El singular espacio propuso a los asistentes actividad física, literatura y arte decorativa nipona. El Máster en Ciencias Omar Laza Herrera, titular del proyecto de desarrollo local junto a otros miembros, realizó una demostración de ejercicios de aikiterapia, método terapéutico creado por él a partir de la conjugación de varias disciplinas, que pretende lograr una mente y cuerpo sano, para aumentar el rendimiento y el bienestar de la persona.
La presentación de Genji Monogatari, de la autora japonesa Murasaki Shikibu, fue otro momento atractivo para los participantes. La obra, escrita alrededor de 1021, constituye uno de los ejemplares más antiguos de la novela y un referente clásico de la literatura.
“Representa un retrato de la aristocracia del Japón feudal, de su cultura en general, y permite comprender la forma de vida de una sociedad rígida. Está escrita en un lenguaje culto, una prosa poética elegante, cautivadora”, refirió la profesora Delfina Galá durante la exposición.
Conocida con ese nombre, en realidad la obra no tiene título, de ahí las numerosas traducciones, entre ellas Genji Monogatari (Romance de Genji), publicada por la Editorial cubana Gente Nueva, en 2010. Un ejemplar de esa tirada puede consultarse en la Biblioteca Municipal.
Asimismo, fue posible apreciar piezas atesoradas por el Museo. “Este juego de tazas para té son de porcelana Noritake, manufactura surgida en 1876. Corresponden, específicamente, al período de Japón ocupado por los Estados Unidos, tras la Segunda Guerra Mundial, cuando la fábrica produjo un tipo de porcelana en masa, para exportar.
“Tienen un estilo más europeo, ya no interesaban tanto los elementos típicos del decorado nipón: florales, de aves, de la naturaleza en general. Usaban más los enjoyados, la imitación de perlas doradas. Es pintada a mano. Perteneció a la familia sancristobalense García Álvarez y Mendizábal”, explicó Elda de los A. Jiménez Teherán, museóloga.
El intercambio evidenció cuan provechoso puede resultar la alianza entre proyectos de desarrollo local e instituciones culturales y de otro tipo, en los municipios.