La primera medallista de Artemisa en los 60 Juegos Escolares Nacionales no es una muchacha corpulenta, pese a ganar sus preseas en el levantamiento de pesas. Eso sí, a Barbarita le sobra decisión y la seducen los retos.
Justo en su debut en este certamen, conquistó medalla de plata en la modalidad de arranque, bronce en envión y una más de bronce en el total.
“Me gustó competir. Conocí a varios muchachos nuevos, hice amigas. Aunque todos queríamos ganar, nos sentíamos como amistades, más que rivales. Y no fue un reto tan fuerte; en los entrenamientos había levantado más. Fueron 46 kilogramos en arranque y 55 en el envión”.
Tal vez Bárbara de la Caridad Hasty Cuesta piensa que puede levantar el mundo sobre su cabeza. Nada parece asustarla. Como no creyó nada raro elegir un deporte que, habitualmente, solo practicaban los hombres. Ella es de una nueva generación destinada a demoler tabúes.
“Un día estaba mirando una competencia de pesas en la televisión, me gustó y salí a buscar a una profesora para que me enseñara. Ella es campeona nacional. Vive cerca de aquí. Me entrenó y me encanta.
“¿La primera prueba? Sí, pesaba mucho y ese reto me atrajo más. Así es el deporte. ¿Mi familia? Ellos aprueban lo que yo decido, y están felices de que me vaya bien”.
Yadima, su mamá, lo confirma. “A mí las pesas no me llaman la atención. Me asombró cuando su entrenador me dijo que contaba con ella. Yo fui judoca y jugadora de hockey. Pero ¿pesas? Sin embargo, a ella le gustó, decidí apoyarla y aquí están los primeros resultados”.
Su propio entrenador, Ismel Torres Rodríguez, explica que le vio condiciones. “No tiene que ser muy corpulenta, solo precisa decisión y vocación. Le hice las pruebas antropométricas, de físico, somatotipo, de flexibilidad, posturales… y la capté para la Eide Julio Díaz.
“Empezamos a trabajar, primero por la técnica, a la par de la preparación física, y luego la fuerza. Cada mes se le realiza un test para saber cómo va asimilando la carga física e incrementa su desarrollo deportivo.
“Ya este es su segundo curso. El anterior no se convocó la categoría de 13 y 14 años a los Juegos Escolares. Este año sí, y ya ve. Pudimos mejorar un poco más; son cosas de competencia: su primera incursión en un evento nacional”.
Ismel subraya el amor, la voluntad y el sacrificio de atletas y entrenadores, justo cuando la alimentación en la Eide está muy lejos de ser la apropiada.
“No es un deporte en que dejes de entrenar tres días y retomes el trabajo donde te quedaste; tiene que empezar otra vez desde cero. Afortunadamente, ella sobresale por su entrega; tiene la voluntad necesaria.
“Me satisface que la prensa promueva los resultados de Barbarita en los Juegos Escolares, principalmente porque la rama femenina no suele recibir mucha divulgación, aun con otras dos pesistas artemiseñas campeonas y recordistas nacionales: Yennedy Cabrera y Melanie Sánchez, integrantes del equipo Cuba”.
Eso cambiará, desde luego, porque las mujeres son capaces de cuanto se propongan y merecen reconocimiento por ello, sea con un balón en los pies o unas pesas en sus manos, como Barbarita, que todavía no puede levantar el mundo sobre su cabeza, pero sí a Artemisa e incluso a Cuba.
Braaavaaaaa!!!!