Para el marieleño Alien Bolivar Mejías es su primera experiencia en la Zona Especial de Desarrollo. En un centro dedicado a la fabricación y comercialización de artículos plásticos y moldes, que recién comenzaba su andar, inició el camino, abriéndose paso a nuevas oportunidades de aprendizaje y desarrollo profesional.
ECOPLASTS.A.—empresa cubana de capital 100 por ciento extranjero y primer usuario del Parque Industrial ViMariel—, acogió a quien se convertiría en operario de su moderno equipamiento (máquinas de inyección y soplado), y se desempeñaría, además, en el rol de jefe de turno.
Se trataba de su primer acercamiento a una industria de este tipo. “Aprendí cuanto sé con el tecnólogo del centro, quien nos ha ido capacitando y evaluando el proceder frente a las máquinas. Cada cierto tiempo imparte cursos y las vivencias diarias también nos proporcionan mayores habilidades”, afirma.

En esta empresa de capital portugués, de la que forma parte desde el pasado noviembre, momento en que tuvo lugar su puesta en marcha, asegura sentirse en familia y espera continuar conociendo a profundidad el ramo.
La compañía no solo está autorizada a fabricar y comercializar, de forma mayorista, artículos plásticos y moldes para la transformación de estos, papel, cartón, caucho y otros materiales, además, ofrecer servicios de reparación y mantenimiento de moldes, así como prestar servicios de mantenimiento, reparación, reconstrucción y recapitalización de la maquinaria industrial relacionada con la fabricación de artículos plásticos y sus moldes.
Interioridades de una fábrica
Con el slogan Envases más allá del plástico, a diario esta empresa -que cuenta con un área total de diez hectáreas- consolida su hacer, y puede comercializar sus productos y servicios tanto en el mercado nacional como para la exportación.
En este momento están produciendo pomos de 33 mililitros, medio litro y un litro, así como pozuelos de un cuarto, medio y un litro, y cubetas de uno, cuatro, diez, 15 y 20 litros.
En el caso de las cubetas de cuatro litros, por ejemplo, fabrican tres tipos, una más resistente concebida para almacenar pintura, y otras utilizadas para helado y yogurt.

Por otra parte, obtienen cajas plásticas a partir de encadenamientos productivos; estas se montan y des- montan, de modo que al transportarlas vacías ocupan menos espacio. En tanto, para la etapa veraniega pretenden hacer por vez primera un set de juguetes de playa, que incluye nueve piezas.
También tienen previsto producir bidones y entre sus proyecciones se han planteado incursionar en el papel: iniciarán con vasos de tres medidas.
Desde este centro, un equipo compuesto por ocho trabajadores vinculados a la parte productiva, garantizan la constancia en el proceso, laborando mediante tres turnos de trabajo 24 horas diarias, de lunes a viernes; mientras que, los sábados aprovechan una parte de la jornada.
De equipamientos y más
Según explica Sergio Miguel Da Costa Nicolau, vicepresidente de ECOPLAST S.A., “actualmente estamos produciendo con cuatro máquinas: dos de inyección e igual número de soplado, las cuales son automáticas y semiautomáticas, respectivamente. Intentamos crecer en las primeras a fin de aumentar las producciones.
“Con la demanda actual de pomos podemos tener una sola máquina de soplado trabajando, en cambio, requeriremos de más de inyección. Después, pretendemos incorporar máquinas de extrusión y soplado; es el próximo paso que queremos dar”, ahonda.
“Con la cantidad de moldes que tenemos podemos ir cambiándolos en las máquinas y fabricar varios tipos de productos. La prioridad será producir según la demanda”.

En cuanto a las ventas, refiere que deben dinamizarlas un poco.
“Hasta ahora nos hemos centrado mayormente en La Habana, ya que el tema de la transportación nos afectaba. Como ya contamos con una camioneta propia podemos buscar clientes en otras partes y llegar, incluso, hasta el oriente del país, alcanzando también ese mercado, a partir de un mayor desenvolvimiento en el transporte de mercancías. “De esa forma, tendremos una autonomía en ese sentido, de la cual no disponíamos hasta ahora, facilitándose la entrega de los productos acabados”, agrega.
Y aunque las aspiraciones son mayores, ya cuentan con más de 20 clientes, “entre estos Provari, Conserva, Apicuba, Lácteo, Vitral. También nos estamos acercando a las Mipymes”.
Más allá de Portugal solo tienen presencia en Cuba; en el país europeo, acumulan una experiencia de 21 años en la producción de moldes metálicos. “Esta nueva empresa establecida en la Zona Especial, podemos decir que es una continuación de lo que hacemos en Portugal”, comenta Da Costa Nicolau, quien siempre ha trabajado en el ramo. Precisamente, desde esa nación, llega la resina utilizada en la fabricación de los productos plásticos.
“El tiempo de tránsito era de 15 días, pero al cambiarnos la ruta marítima, pasó a ser ahora de un mes”, detalla. Tras la inversión inicial, trabajan en función de recuperarse y pasar entonces a finales del presente año a la segunda fase del proyecto, que contempla una nueva nave. De esa forma, ECOPLAST irá creciendo paulatinamente, a la par que contribuye con sus producciones y servicios, al desarrollo de diferentes sectores.