El artemiseño Noslen Díaz y el villaclareño Jorge Luis Alayo confiaron siempre en que podían. Por eso lucharon a brazo partido por la clasificación a los Juegos Olímpicos de París 2024 ¡y lo lograron! Con su inclusión en la gran final del Challenge de voleibol de playa disputado en Stare Jablonki, en Polonia, aseguraron el boleto a la Ciudad Luz.
Desde el inicio, impusieron su ritmo en el grupo C durante la fase de grupos, al doblegar 2-0 a los helvéticos Marco Krattiger-Florian Beer y a los australianos Thomas Hodges-Zachery Schubert, por no presentación.
Luego barrieron a los canadienses Samuel Schachter y Daniel Dearing en la ronda de 16, así como a los anfitriones Piotr Kantor y Jakub Zdybek en cuartos de final.
Accedieron a la discusión del oro ante los checos Ondrej Perusic y David Schweiner, habiendo perdido apenas un set, en semifinales contra los hermanos argentinos Nicolás y Tomás Capogrosso, en parciales de 18-21, 21-19, 15-10.
Ya en el último duelo tuvieron net por medio a los campeones mundiales de Tlaxcala 2023. Precisamente, en la eliminatoria por grupos de la justa universal, los cubanos les habían ganado por dos sets a uno. Y, hace poco más de un mes, en la fase élite del certamen en Tepic, México, volvieron a vencerles, por barrida de 21-19 y 21-18.
Esta vez los favoritos checos triunfaron ¡en tie-break! por 17-21, 21-17 y 11-15.
No obstante, Noslen y Jorge Luis prácticamente aseguraron el boleto olímpico. Para confirmarlo, aún habrán de esperar por el desenlace de la fase élite de Ostrava (donde no intervendrán), pero en Polonia pusieron abundante tierra de por medio entre ellos y sus más cercanos rivales: las duplas de Austria (Julian Horl-Alexander Horst) y Chile (Marcos y Esteban Grimalt).
En apenas tres meses escalaron del lugar 30 hasta el 15 en el ranking mundial… y París ha dejado de ser solo un sueño.