La cultura está destinada a no detenerse jamás, por muchos obstáculos que encuentre en su camino, y en este año, si bien le llovieron los contratiempos, también las buenas noticias, cualquiera de ellas dignas de ¨refrescarse¨ en este resumen anual.
Es justo, como siempre, comenzar con el evento cultural más importante de todos: la Feria del Libro, que estuvo dedicada a dos significativas creadoras: la historiadora Reveca Figueredo y la escritora Mireysi García Rojas.
Entre los instantes más destacados de este acontecimiento se halló el panel dedicado al Movimiento de la Nueva Trova, principio de los homenajes al grupo Yawar y su director Rolando Méndez, con 50 y 70 años de vida, respectivamente.
También impactó el homenaje que se rindiera a un significativo grupo de autores artemiseños ya fallecidos: Alberto Rodríguez Tosca, Carlos Jesús Cabrera, Paco Myfriend y a Marilú Rodríguez Castañeda, mujer apasionada, hondamente sincera y con toda una vida entregada a la escritura y al apoyo a los autores jóvenes.



La Feria del Libro, junto a otros eventos como El Jolgorio a Polo Montañez en Candelaria, la XXIII Bienal Internacional de Humorismo en San Antonio, el taller Tras las huellas de Orígenes en Bauta y la reinauguración su biblioteca municipal, la versión provincial del Festival Universitario del Libro y la Lectura (FULL), nutrió un diverso panorama cultural, donde no faltaron galas y homenajes a tono con las más importantes fechas de la Historia de la provincia.
En el universo de las artes visuales, sobresalieron autores como el caricaturista Brady Izquierdo, con otra significativa suma de premios internacionales, Denys San Jorge, ganador del XXXI Salón Provincial de Artes Plásticas Eduardo Abela, con la obra Entre la urdimbre y la trama, y Oniel Rodríguez López con su segundo lugar en el Certamen de Pintura Rápida al Aire Libre, Ciudad de Lugo, en España.
Denys fue coprotagonista, junto a la fotógrafa Sonia Almaguer, de la aclamada exposición La Habana que me han da´o, La Habana que te dejo, inaugurada en el Hotel Nacional y donde importantes figuras de la cultura del patio e internacional se dieron cita para disfrutarla, al igual que en la Biblioteca Antonio Maceo, en Bauta.
Exposiciones como Palante en Bauta, dedicada a esta histórica publicación humorística con 62 años de vida, gozó de amplia preferencia entre el público de este municipio de fuerte tradición en las artes visuales.
Desde la Uneac artemiseña llegó la noticia de que el escritor Miguel Terry Valdespino había merecido la Beca Fundación de la Ciudad de Artemisa gracias a su proyecto de libro Sombra detodos los miedos, que Miguel Ángel Ortega obtuvo con Resorte el Premio Rubén Martínez Villena de Poesía y Elena María Obregón la Beca de sonetos por el proyecto El sabor del silencio.
Gracias a su fecunda obra, 13 nuevos creadores artemiseños obtuvieron el derecho a formar parte de esta organización: José Alberto Nápoles, Reveca Figueredo, Osvaldo de la Caridad Padrón, Daniel Suárez, Dimarys Águila, Reinier del Pino, Eric García, Raúl Solano, José Sisto López, Emilio Soto, Rolando Aguilar, Yaremis Verde y Jonnie Martínez Nieves.
En medio de transformaciones para mejorar su estructura y razón de ser, la sede de la Uneac no dejó de acoger a diversos eventos, peñas, conciertos y homenajes a lo largo del 2023, ni de elegir su Comisión de trabajo con vistas al próximo congreso de la organización.
Un nuevo equipo de dirección salía de la asamblea provincial de la Asociación Hermanos Saíz, encabezado por el músico Jorge Raymel Quiñones en relevo de quien tanto oxígeno le diera, el músico José Sisto López, ambos presentes como delegados en el IV Congreso de esta asociación artístico-juvenil, junto a la bailarina Dorys Cabrera, la vocalista Amanda Fernández Graverán y la promotora y vocalista Odelín Núñez Travieso.
La reconocida narradora Olga Montes, por segunda ocasión, volvió a tocar el cielo del Premio Fundación Ciudad de Matanzas con su novela Mujeres de café, casi ya a punto de convertirse en una telenovela, mientras que el repentista Sergio Reyes retornó de la Jornada Cucalambeana en Las Tunas con el Premio Nacional de Repentismo Justo Vega.
El Proyecto Arte Vivo, radicado en el Consejo Popular del Central Habana Libre, recibió el Premio del Barrio, el escritor Enrique Garcés mereció la réplica del machete del Generalísimo Máximo Gómez, el poeta Reinier Rodríguez alcanzó el tercer puesto del certamen poético Olivo Milenario-Oro Líquido, en España, y dos niños marieleños, Sofía Álvarez Cruz y Gabriel David González, resultaron premiados por la Liga Mundial de la Hipertensión en el Concurso Internacional de Arte Infantil.
Gozó de mucha aceptación el hecho de que en varios municipios artemiseños continuaran desarrollándose algunas variantes de La Colmenita de Juan Carlos Cremata, espacio donde los niños y niñas crecen espiritualmente y, tanto ellos como sus padres, se enfrentan a los retos más difíciles y hermosos para concretar cualquier obra en escena.
De Colombia hacia Cuba, y de Cuba hacia Colombia fue la trayectoria de un par de maestros del teatro y también miembros de la Uneac: el doctor Miguel García Ordaz y el dramaturgo Juan José Jordán. El primero, tal como nos tiene acostumbrados, vino a sumergirse en la impartición de grupo de talleres en diversos espacios de la provincia, en tanto el segundo desarrolló una valiosa promoción literaria en los ámbitos docentes y teatrales.
Alto voló y sonó el III Evento Internacional Danzapuentes, con sede principal en Caimito y encabezado por Jonnie Martínez Nieves, director de la compañía NC Dance, y con la participación de NC y de las compañías Alma Mexicana y Esencia de México, capaces de encantar a un público que, por espacio de ocho días, en teatros, parques y barrios vulnerables no dejó de seguirlos ni un segundo.
El evento Artemisa Mestiza, dedicado al maestro del laúd Erdwin Vichot Blanco, también reconocido con la Distinción Gitana Tropical, además de mucha música de las agrupaciones y solistas cubanos más renombrados, regaló de parte de la Comisión Aponte, con el etnólogo y escritor Miguel Barnet como invitado, un viaje por todo lo que representa culturalmente el aporte africano y cubano al pentagrama nacional.



Cargados de premios retornaron los representantes de nuestra provincia en el XXXIV Festival Nacional de la Radio, celebrado en Holguín, donde se dio a conocer que la joven provincia artemiseña será la sede del próximo Festival.
Los realizadores Yusiván López, Hernán Iglesias, Evelyn González, Danielis Carmenate, Laura María Ortega, Gresimary Zamora y Mayda Ramón fueron los encargados de alimentar esta gran cosecha de éxitos.
Meses antes, María Elena Luis, una curtida realizadora de Radio Ariguanabo, había salido por la puerta grande en el evento teórico Caracol tras obtener el Premio Cucumí, en la categoría infantil, por una novedosa versión de Francisca y la muerte, uno de los cuentos más significativos del maestro Onelio Jorge Cardoso.
Los periodistas también se hicieron sentir en los podios gracias a Reinier del Pino, vencedor con su trabajo Confesiones de un Frankenstein literario en el VI Concurso Nacional de Crónicas Caridad Pineda in memoriam y Alejandro Lóriga con su Premio Nacional Rubén Martínez Villena de la AHS por su radiodocumental Angerona: nunca más el silencio, más una mención en la categoría de hipermedia en el concurso nacional de periodismo 26 de julio.
Desde el programa televisivo La Neurona Intranquila llegó la buena nueva de que un artemiseño, el profesor universitario Luis Enrique Domínguez, se había llevado la victoria en su edición anual.
Un grupo verdaderamente memorable de la escena criolla, Los Cuenteros, siguió entregando nuevos proyectos y su arte, sin distinción alguna, tanto en espacios con mejores condiciones teatrales como en los más diversos barrios donde residen nuestros niños.
Aunque fue de lamentar la nula presencia de espacios de promoción literaria en municipios como Alquízar, donde el talento literario de su vanguardia ha sido despreciado, en Artemisa, San Cristóbal, Caimito y Bauta en especial se ha estimulado el aporte de sus mejores escritores, tal como ha sugerido el presidente cubano Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
Cuando aún contaba con mucha creatividad para regalarnos aún, falleció el pintor y grabador bautense Álvaro Pérez Medina, un artista que supo hallar en el simbolo del pez un mensajero perfecto para llevar al público sus inquietudes creativas.
Casi milagrosamente, tres creadores bahiahondeses, el trovador William Montero, la poetisa Olga Lidia Oliva Peña y el narrador Javier Cruz, sobrevivieron a un trágico accidente que no les impidió, en menos de un año, retornar de nuevo a los sueños de la música y la escritura.
Son estos logros una parte de lo alcanzado por nuestros creadores en el año que ya se marcha. Ya está en camino el 2024. Seguramente los éxitos de nuestros artistas y escritores no se detendrán, por muy fuerte que bata el viento de las dificultades. La cultura no suele detenerse por muchos vientos que tenga en contra.