Cuba busca un nuevo despertar de la industria de la construcción gracias a la colaboración de países hermanos, cuyas producciones tienen un impacto considerable en la urbanización y los fondos habitacionales. Ello trascendió durante la visita del Comandante de la Revolución Ramiro Valdés Menéndez a la provincia de Artemisa.
Este territorio muestra indicadores desfavorables en el programa de producción de materiales de la construcción: de los 189 renglones establecidos, solo se cumplen 37 (16 %) pese a las altas potencialidades en recursos naturales, residuales de canteras, y el plástico reciclado.
En el intercambio especialistas nacionales demostraron la evolución de los hornos en la historia de la humanidad y la necesidad de incorporarlos en industrias locales. Pese al interés nacional que representa, en la provincia múltiples causas impiden la producción de ladrillos y otros elementos de barro.
Bauta, Alquízar, Caimito y Güira de Melena reportan por cientos bajos en el programa de producción local de materiales, mientras San Cristóbal y Candelaria sobresalen en el número de renglones gracias a la identificación de recursos, y los encadenamientos fundamentalmente con artesanos cuya experiencia facilitan procesos.
«Muchas veces para resolver un problema creamos una estructura, y realmente lo que necesitamos en organizar el trabajo e implementar microbrigadas bajo el control popular. Para ello están las organizaciones de masas que deben ser efectivas, encargados de movilizar al pueblo y hacerles parte de un programa vital en estos momentos», destacó el también primer viceministro de la República de Cuba.
«Tenemos cerca el problema y la solución, pero no lo combinamos. La tecnología no nos puede limitar; corresponde encontrar alternativas», precisó.
En cuanto al programa de recuperación materias primas se cumplen la ventas al 104%. La estrategia del territorio pretende involucrar a representantes de organizaciones de masas, en especial pioneros y los Comités de Defensa de la Revolución, alcanzándose nuevos productos que deben estar dirigidas, según Valdés Menéndez, a sectores primarios como los módulos de canastilla.
También chequeó, ante la actual situación electroenergética, el comportamiento del consumo en el sector residencial cuyo promedio de está en 200 kw/h por vivienda. En nuestros hogares, subrayó, es donde corresponde ganar una batalla determinante pues se da el caso de familias que no asumen el ahorro con responsabilidad, y afectan a vecinos y la propia generación eléctrica en el país.
Acompañaron al Comandante de la Revolución, Gladys Martínez Verdecia, integrante del Buró Político y Primera Secretaria del Partido en Artemisa, y el Gobernador, Ricardo Concepción Rodríguez.