Refrescar en las claras aguas de la piscina y apreciar la belleza del río Ariguanabo, la flora y la fauna son atracciones del Hotel Las Yagrumas, donde no se detienen las obras recuperativas con un valor superior a 60 millones de pesos en moneda nacional, en busca de una experiencia agradable para sus visitantes.
La instalación, de la cadena Islazul, atraviesa por una reparación capital desde finales de 2021, lo cual ha limitado sus servicios al alquiler de la piscina y el alojamiento, en especial a trabajadores estatales y deportistas.
“Aunque recibimos clientes extranjeros, en lo fundamental de España y Canadá, e incursionamos en el mercado interno, mediante la página en facebook Hotel Las Yagrumas. Tenemos perfiles en Instagram, Twitter y Tripadvisor, pero se encuentran desactualizados debido a que no está cubierta la plaza de comercial/comunity manager”, explica la informática Idielín González Pérez.
Una nueva imagen recibe al cliente en el lobby, los baños y el restaurante, como parte de la renovación de espacios, si bien queda pendiente la parrillada de la alberca en los próximos días, cuya remodelación civil corre a cargo de la Mipyme Génesis, mientras el equipamiento (planchas, freidoras…) lo asume Tecnotur, de acuerdo con Guillermo Seijo Amaral, jefe de servicios técnicos.
“La primera etapa de la construcción, ejecutada por la Inmobiliaria Habana, UEB Oeste abarcó también siete de 10 bloques de 12 habitaciones. Quedan pendientes tres: uno en espera de pintura, en tanto trabajan en la sustitución de las redes sanitarias de las 200, y el de las 100, el más deteriorado, aún debe contratarse”.
Seijo Amaral precisa que, de las terminadas, 28 habitaciones no poseen televisor y 48 no tienen aire acondicionado (de ningún tipo), lo cual entorpece frecuentemente su explotación, además de la ausencia de minibares, otro “valor agregado” al servicio.
En el momento de nuestra visita, la Mipyme La Hermandad S.R.L., en Guanabacoa, La Habana laboraba en el rescate del bloque de las 200, a fin de cambiar las redes de desagüe, la marquetería de madera de las terrazas por aluminio y reparar las de la entrada.
Roberto Guerra Nápoles, el ejecutor, comentó que comenzaron desde el 15 de diciembre y han concluido varios bloques, con el ánimo de causar “la menor molestia posible a los clientes y no estropear el entorno”.
Según el jefe de servicios técnicos, “falta por activar la sala de masajes, a la que deben colocarle una pieza de bambú decorativa, y en la de juegos ha de finalizar la reparación de la mesa de billar, si bien tampoco dispone de aire acondicionado”.
Asimismo, “se estima que, al cierre del primer trimestre, queden listas estas zonas recreativas, junto a la discoteca, la que solo aguarda por un mural artístico, responsabilidad de Génesis. También está previsto en el proyecto rescatar la ruta de senderismo natural por las márgenes del río y el recorrido en botes, desde el embarcadero”.
Las 400, uno de los bloques terminados, goza de buena aceptación de los turistas foráneos, aseguró el directivo, gracias al confort y la vista al bosque ecológico en ejecución. Además, “queremos ambientar los bancos y hacer un ranchón cerca del río para la venta de refrigerios, todo en un entorno cien por ciento natural”.
Si usted llega desde La Habana, Mayabeque o Artemisa, si reservó mediante las agencias españolas contratadas con Islazul y desea contagiarse del encanto de Las Yagrumas, ya tiene idea del futuro de esta joya del Ariguanabo, un destino que se empeña en ser más sugerente y divertido.
