El danzón es un baile cubano cuyos orígenes datan del año 1879. Creado por el compositor matancero Miguel Faílde y como resultado de la transculturación de la contradanza europea, este género gozó de gran aceptación en nuestro país, llegando a ser el arquetipo de la música popular con su ritmo característico. Para este baile de salón se emplean instrumentos musicales como el piano, la trompeta, el clarinete, la flauta, los timbales, el güiro y las claves.
En Güira de Melena aún se defiende este género en los talleres de la Casa de Cultura Ignacio Cervantes, donde recientemente se celebró el Evento Municipal de Danzón, a cargo de la Brigada de Instructores de Arte José Martí y de Misachy Rodríguez Amat, instructora de Danza y jefa de cátedra de la Casa de Cultura.
En el encuentro participaron 11 parejas, tres de ellas compuestas por niños, dos por adultos y seis por adultos mayores, todos pertenecientes a los talleres. También se sumaron personas del público. Entre los elementos a evaluar en la competencia sobresalieron el vestuario, el paso básico, conocer las tres partes del danzón y el manejo del abanico.
La instructora Misachy Rodríguez Amat señaló que, además crear un espacio entretenido y a la vez útil, el evento tuvo como objetivo revitalizar y difundir nuestro baile nacional, como primera expresión musical bailable de la nación cubana, sobre todo a partir del trabajo con las nuevas generaciones, para apoyar también al espacio mensual Danzoneando, de la casa de cultura.
Para el mes de marzo, en San Antonio de los Baños, se prevé el evento de carácter provincial en el cual el municipio estará representado por los ganadores Yolanda y Raúl.
Rescatar tradiciones, más que obligación, es hoy una necesidad, de ahí la voluntad que ponen en Güira de Melena para que el danzón se mantenga vivo.
