Recién Artemisa anotaba una carrera y se iba delante ante Guantánamo, en el segundo desafío de la subserie entre ambos, cuando, apenas comenzar la tercera entrada, los truenos y la lluvia volvieron a hacer de las suyas en el Estadio 26 de Julio.
Ya los Cazadores le habían conectado cinco imparables al derecho Randi Salazar, mientras Alejandro Hernández les recetaba a los Indios tres ponches en apenas dos capítulos de actuación… y no les permitía jits.
El joven serpentinero artemiseño es uno de esos casos que hemos visto en disímiles ocasiones: puede encarar problemas con el control y lanzar la pelota muy lejos de la zona de strike, pero, tan pronto afina la puntería, sus envíos endemoniados hacen estragos.
Suma 18 ponches en 13 episodios y únicamente cinco sencillos, para un anémico average en contra menor a 139.
Lamentablemente, al reanudarse el partido en la mañana del jueves, los nuestros no podrán contar con esa velocidad temible, que alcanza hasta 95 millas por hora, pues en dos innings rebasó el límite de lanzamientos establecido.
El juego de la tarde debía de abrirlo Dayron Díaz. ¿Qué hará, ahora, el director Yulieski González? ¿Lo mantendrá para el segundo choque del doble programa, o lo utilizará para concluir el duelo sellado? El siguiente en la rotación es Brander Guevara. Veremos qué decide el timonel de los Cazadores.