Los sabíamos grandes. ¡Pero qué clase de bravuconada esta del artemiseño Noslen Díaz y el villaclareño Jorge Luis Alayo! Nos han reavivado el amor al voli, y a ellos esa pasión los llevó a convertirse en campeones del torneo Élite de Quintana Roo, certamen del Pro Tour Mundial de Voleibol de Playa 2025.
Al iniciar la lid con derrota ante la dupla alemana Henning -Wüst, por 22-20 y 21-11, parecía que estaban fríos para encarar semejante competencia (el fin de semana precedente, habían quedado quintos en la apertura de esta edición del Pro Tour Mundial, en el challenger de Yucatán, cuando luego de tres victorias cayeron 1-2 a manos de los portugueses Joao Pedrosa y Hugo Campos en cuartos de final).
Sin embargo, en su segundo desafío en Playa del Carmen, en el arenal contiguo al Parque Fundadores del Corazón de la Riviera Maya, se desquitaron 2-0 frente a los suecos Jacob Hölting Nilsson y Elmer Anderson.
De esa manera, pasaron a la ronda de 18. Entonces, barrieron también a los alemanes Lukas Pfretzschner y Sven Winter. A continuación, recetaron otro 2-0 (21-18, 21-17) a la segunda dupla de Noruega, integrada por Hendrik N. Mol y Mathías Berntsen, por el acceso a cuartos de final.
Les tocaría en esa instancia verse las caras con los checos campeones del orbe Ondrej Perusic y David Schweiner. Cierto, ya archivaban dos triunfos sobre los europeos en los tres duelos anteriores, incluso en el Campeonato Mundial de Tlaxcala, México, donde, a pesar de ese revés, sus rivales llegaron a lo más alto del podio.
Volvieron a superarlos en su debut en una fase Élite del Pro Tour Mundial, en Tepic, México, mientras los eslavos tomaron revancha en la final del challenger de Stare Jablonki, en Polonia.
Ahora los de más allá del Atlántico los dominaron en el primer parcial por 16-21, y arrancaron el segundo con ventaja de inmediato, solo que estos muchachos no creen en coronas ni en marcadores adversos.
Los ataques se sucedieron.
Jorge Luis Alayo sumó 20 puntos, entre ellos tres por bloqueos y cuatro con el saque. Noslen Díaz no fue menos: agregó 19 puntos, incluidos seis demoledores aces.
“Contra los checos sabíamos que iba a ser un gran partido. No podíamos flaquear. Nos supimos reponer, sacando ese extra de siempre: de venir de abajo y lograr la victoria, de no darnos nunca por vencidos, siempre salir a guerrear y dar el máximo en cada momento”, declaró Díaz a el artemiseño.
Así accedieron a la séptima ronda semifinal en 11 fases del Pro Tour. A esas alturas, ya nadie podría interponérseles. El 2-0 (21-13 y 25-23) a los neerlandeses Steve van de Velde y Alexander Brouwer los llevaría a la final, donde sometieron a los hermanos argentinos Tomás y Nicolás Capogrosso, en una barrida más (21-13 y 24-22).
“Es la primera medalla de oro que conquistamos en una competencia. Ha sido súper emocionante, la verdad. Y más en un Elite 16, acá en México, con la afición constantemente gritando ‘Cuba, Cuba’ y muchos cubanos aquí también apoyándonos. Se sintió increíble. Una de las cosas que nos faltaban era ganar un campeonato. Estamos muy felices”, expresó el espigado joven de Artemisa.
Después de tantos consagrados que han pasado por Playa del Carmen, los cubanos encontraron oro en esas arenas mexicanas, e irán por nuevos botines dondequiera que lleguen.