Ante la contingencia energética que vive la provincia y toda Cuba, en el municipio San Cristóbal se toman medidas para garantizar servicios básicos a la población.
La intendente en esa localidad, Idalmys Quiñones González, explicó que se traza una estrategia a corto plazo de acuerdo a las prioridades:
«Con el agua de los carros cisternas (pipas) de la estructura económica administrativa, vamos a proteger el hospital, se trata de apoyar el suministro, pues no es esta la solución para el volumen que la institución demanda», apuntó Quiñones González.
Además, se activó un punto de distribución de agua en la Empresa Filial Agropecuaria José Martí para abastecer las pipas de distribución a la población.
Varios circuitos ya fueron energizados durante las dos horas planificadas por la Empresa Eléctrica Provincial de Artemisa ante la situación de crisis. En ese tiempo comenzó a bombear la fuente de abasto de Carrillo, que estuvo sin prestar servicio por avería durante varios días, ya está en funcionamiento aunque fue breve el periódico de bombeo.
En estos momentos se prioriza el circuito 340 de Los Pinos, donde se ubica la fuente que suministra el agua del hospital Comandante Pinares en condiciones de normalidad
Se indicó a la UEB Comercio elaborar alimentos para llevar o consumir en los principales centros de la gastronomía y en los consejos populares.
La producción de pan, que ya estaba concentrada en las panaderías que cuentan con grupos electrógenos, se comenzará a realizar con leña y carbón.