En el Diario de Campaña de José Martí, de Cabo Haitiano a Dos Ríos se evidencia su interés por la medicina y las ciencias. El uso de plantas medicinales para aliviar y calmar algunas dolencias, así como algunos medicamentos de la época, constituyen ejemplos de la riqueza de conocimientos y pensamiento del Apóstol.
Con fecha 16 de abril de 1895, dice: “el General me dio a beber miel, para que probara que luego de tomarla se calma la sed”.
La miel posee propiedades antinflamatorias, antisépticas, antibacterianas. Muy utilizada para contrarrestar los dolores de garganta y aliviar la tos.
En Grecia y Roma era costumbre utilizarla para dar dulzor a los vinos, el agua y en jugos de frutas. Además, en algunas culturas era consumida como símbolo de fuerza y de inmortalidad.
Señala el 19 de abril: …“trae algo, más café, culantro de Castilla, para que cuando tengan dolor al estómago por esos caminos, masquen un grano y tomen agua encima”.
El café, bebida de alto consumo en Cuba, tiene propiedades preventivas, protectoras, estimulantes, afrodisíacas, antiasmáticas y febrífugas (eficaz contra la fiebre).
El cilantro, conocido además como culantro europeo, perejil chino o coriandro, es utilizado en la cocina por su aroma en las elaboraciones. Posee propiedades terapéuticas, alivia los problemas digestivos y se utiliza para tratar las hemorroides, el sarampión, infecciones por bacterias, dolores de muela, entre otros padecimientos.
En su diario a finales del mes de abril, señala la majagua, árbol nacional de Jamaica como medicina. Esta planta calma los malestares gastrointestinales y respiratorios, el dolor de oídos. Además, la mezcla de las flores de majagua y alcohol alivia los dolores reumáticos y musculares.
El curujey, la palma, el almácigo y la yamagua, de la cual escribe “…y la yamagua que estanca la sangre…”, son otras referencias en sus escritos.
Esta última regula la menstruación abundante, alivia las hemorragias intestinales, vaginales y uretrales.