La Constitución de la República de Cuba reconoce, en sus artículos 86 y 87, a niñas, niños, adolescentes y jóvenes como sujetos de derecho y activos participantes de la sociedad, a la vez que señala el deber del Estado, la sociedad y la familia, de brindar protección contra todo tipo de violencia y garantizar su desarrollo armónico e integral.
Basados en esas premisas, realizan su trabajo en la Dirección Municipal de Educación en San Antonio de los Baños. Allí conversamos con Marbelis Marrero Marrero, la subdirectora a cargo del trabajo preventivo y político ideológico con niños hasta los 18 años de edad.
¿Cómo funciona este sistema de prevención y atención a menores?
“Nuestro trabajo se realiza con un sistema integrado por todos los factores que velan por el bienestar de niños y adolescentes. Acá entra la familia, como la célula funda- mental, más las organizaciones de masas como CDR, FMC y organismos como el Minint, el Minsap, Educación, los Trabajadores Sociales y otras instituciones.
“Desde que el niño nace hasta los 6 años, en cada comunidad realizan su labor las promotoras del Programa Educa a tu Hijo. Estas trabajan en edades tempranas para integrar a esos infantes y familias en su preparación general antes de entrar a las escuelas.
“Al arribar a la edad escolar, contamos en cada escuela con psicopedagogos que realizan evaluaciones a los niños con cualquier tipo de problema. Existe un grupo al cual se le brinda atención especial, son los que integran la Tarea Victoria, donde se encuentran los menores de edad con uno de sus padres o ambos en reclusión penal. A partir de esa situación se le brinda apoyo al menor y a la familia desde diferentes esferas.
“Los profesores en las escuelas tienen en conocimiento sobre esta disfuncionalidad familiar que puede afectar en la mayoría de los casos el rendimiento escolar y actitud ante el estudio.
“Es un trabajo mancomunado que parte desde el barrio. Cada escuela a su vez es atendida por una trabajadora social, estas realizan una importante labor al ser el puente entre la comunidad y la escuela. Sobre las particularidades de San Antonio de los Baños, Marbelis Marrero Marrero explica que “es un municipio complejo, con gran cantidad de población flotante, no obstante, nuestra dirección identifica esos casos y orienta a las familias sobre cuáles son los trámites a seguir.
Los niños que llegan de otros municipios, por traslado o tránsito, deben tener una carta de aceptación del municipio, ahí les damos continuidad de estudios. Si no tiene el expediente acumulativo en el municipio, porque el tránsito lo piden hasta tres meses,le orientamos a la familia que nos haga llegar el expediente. No obstante, se les da un seguimiento. Ningún niño deja de ser atendido en nuestro municipio por vía escolar.
“En cuanto a cifras, trabajamos aproximadamente con más de 1 000 educandos entre 16 y 18 años; esta cifra se actualiza en cada curso escolar. En la Tarea Victoria, mencionada anteriormente solo atendemos a 17 niños y de ellos solo un caso crítico, con dificultades en los tres ámbitos que evaluamos: escuela, comunidad y hogar.
“Se trata de un trabajo complejo. Recientemente recibimos señalamientos sobre cuatro niños desvinculados del sistema educacional. Ocurre que hay padres que se trasladan a vivir a otros lugares y no realizan los trámites pertinentes; en estos casos, a través de coordinaciones con el Minint y otras instituciones, tenemos localizados a tres de ellos y el cuarto presenta un padecimiento por lo cual se le gestionó la atención médica priorizada además de asignarle un maestro ambulatorio para recibir clases en su vivienda.
“Después de dieciocho años al frente de esta tarea, es importante recalcar que nuestro trabajo es preventivo, pero también es trabajo político ideológico. Se trabaja todos los días y el apoyo de los metodólogos provinciales y municipales en cada nivel de enseñanza es vital. Hoy podemos decir que, en nuestro municipio hasta noveno grado, no tenemos desvinculados.
“Sin embargo, tenemos muchos que al terminar el noveno grado no quieren seguir estudiando, unos porque su capacidad no les da para preuniversitario, otros porque su acumulado escolar no alcanza para aspirar a un técnico medio, entonces optan por escuelas de oficios y después abandonan porque no les gusta esa enseñanza a la familia y esta a su vez, no es capaz de hacer entender a los adolescentes que hay que estudiar y superarse.
Los retos son complejos para el sistema educacional cubano, pero estos también obligan a perfeccionar métodos y estilos de trabajo, por el bienestar de nuestros niños y adolescentes. La Dirección de Educación en la Villa del Humor, no dejará de trabajar bajo el ejemplo de Fidel quien expresó: “La Revolución ha prestado, presta y prestará el máximo apoyo a la educación y a la formación de nuestros niños, porque ellos son el futuro del país».