Noslen Díaz, de Artemisa y el villaclareño Jorge Luis Alayo, perdieron dos sets a uno ante la dupla sueca de David Ahman y Jonatan Hellvig, pero se han ganado el aplauso de toda Cuba por el talento y coraje demostrados sobre la arena de París.
¡Vaya injusticias de la vida! Al dominar el grupo D, el organigrama les regaló un duelo ante quienes quedaron terceros en el grupo A, porque vencieron apenas en un partido y fueron derrotados dos veces. Pero esa pareja es la de los subcampeones mundiales en 2023 y actuales líderes del ranking del orbe.
Los europeos solo consiguieron una victoria ante la dupla de Australia de Carracher-Nicolaidis, y encajaron dos reveses frente a los italianos Cottafava-Nicolai y los cataríes Tijan-Younousse).
Ahora avanzarán a la fase de cuartos de final con dos triunfos, dos fracasos y cinco sets en contra, mientras los cubanos se impusieron en tres desafíos y cayeron en una ocasión, con nada más que los dos sets de hoy perdidos.
Resulta que este era el juego de muerte súbita, y ahí se impusieron sus rivales. A los nuestros les resultó muy difícil descifrar el juego de los suecos en el primer parcial, de modo que sucumbieron 11-21. En el segundo derrocharon coraje para imponerse en cerrado 28-26. Y cayeron 15-11 en el tie break.
A diferencia de otras actuaciones en París 2024, los muchachos del voleibol de playa se ganaron, sin duda alguna, el aplauso de toda Cuba, porque llegaron a la Ciudad Luz a derribar gigantes: le plantaron cara a cada uno y pusieron bien alto el nombre de este archipiélago.