La extensión del horario de trabajo a 12 horas, desde las diez de la mañana, con excepción del lunes, es noticia inmediata en la Unidad Empresarial de Base (UEB) K-59 en Artemisa. Sobre esta institución regresamos a las páginas de el artemiseño con otra novedad: cambió el director y ahora comanda al colectivo el experimentado Armando Ortega León.
No sin tropiezos, le cuento que el establecimiento ha mantenido su oferta de carne de cerdo como atracción principal, además de refrescos, cervezas y otras bebidas, que compran a las nuevas formas de gestión.
Pero esta entidad estatal, de las pocas que parecen sobrevivir a la migración de la gastronomía hacia otros “modelos”, no se encuentra en condiciones de competir con sus semejantes, en cuanto a precios y ofertas.
Ortega León refiere que la unidad se concibió con el propósito de establecer contratos con diversos proveedores, y por el momento solo lo han logrado con una decena, todos en su misma categoría.
Entre ellos figuran la UEB Mayorista de Productos Alimenticios 232 de San Antonio de los Baños, las UEB Porcino San Pedro y Aseguramiento Guanajay, la Empresa de Bebidas y Refrescos Artemisa, Acopio, ylas empresas Porcina y Alimentaria.
Ese vínculo no ha sido posible con otros actores económicos, muchos renuentes a aceptar pagos porcheques. La dirección del K-59 dice sentirse atada de pies y manos, ya que les prohíben extraer más de 5 000 pesos a la semana de su cuenta bancaria. “Todavía no se han distribuido entre los trabajadores las utilidades correspondientes al último trimestre de 2023, ni nos han aprobado la adquisición de equipos necesarios para nuestra labor, como una impresora, y un audio para amenizar las actividades”, puntualiza Ortega León.
Una experiencia similar refieren muchos de los que deciden emprender proyectos de esta naturaleza. Resulta inconcebible que en una provincia tan agrícola como la nuestra, en una entidad gastronómica se adquiera la libra de tomate a precios minoristas, o la ración de carne de cerdo no se pueda acompañar de una buena guarnición de vianda frita.
Si se encuentra abierto en los horarios de almuerzo y cena, el K-59 habría de ofrecer también esos servicios…, por supuesto, si compraran arroz, frijoles, sal, azúcar, por solo citar algunos, a precios razonables.
Tampoco adquieren ron, de modo que la coctelería brilla por su ausencia, y en las noches esta esquina estratégica permanece en silencio, casi a merced del olvido.
Pese a los inconvenientes, se acercan al cumplimiento del plan de circulación mercantil, en especial, por los servicios a organizaciones, aunque su función de parrillada para el pueblo, ha de ser la primordial . Además, el director explica que a partir de marzo, habilitarán un punto de venta móvil de líquidos, lo mismo con vinagre, sirope, adobo, cerveza y otros productos.
La UEB crece con la incorporación de una cafetería en la sala de espera de los acompañantes del paciente grave, en el Hospital General Ciro Redondo, y la del establecimiento El pre.
En busca de rentabilidad, el K-59 tiene que convertirse en un punto de encuentro para la familia artemiseña, por sus propuestas atractivas, la presencia de artistas locales, la atención profesional de su colectivo y el uso de pasarelas de pago electrónico (una deuda todavía).
Entretanto se recuperan el restaurante y el área de festejos de este coloso, se puede lograr más confianza en el retorno de un sitio estratégico para la vida cultural de la Villa Roja.
La parrillada del k-59 sin obtener resultados imposible con l talentoso y prestigioso q es armando ortega León , lo bien q le gusta trabajar sobretodo sin violar las normas correspondientes ya que es un excelente jefe y ser humano