Antes de comenzar la Serie Nacional de Béisbol en su edición 62, tuve el privilegio de cubrir para el periódico el artemiseño la ceremonia de abanderamiento de los Cazadores de Artemisa.
El acto realizado en el Mausoleo de los Mártires en la capital provincial me permitió vivir de primera mano el estreno de Yulieski González Ledesma como director de un equipo que junto a la afición llevaba un tiempo pidiendo su incorporación .
Cualquiera puede pensar que el cambio de dirección no sería algo sustancial para un equipo que ostentaba un quinto lugar bajo las órdenes del fallecido Dany Valdespino pero , fue todo lo contrario.
No podía ser de otra manera cuando al entrevistar a los atletas todos coincidían en que el otrora estelar lanzado era » hombre y amigo «. Uno por uno me hablaban de Yulieski y utilizaban esos calificativos y es que el paso del tiempo demostró que esas palabras se convirtieron en profecía cumplida.
Los Cazadores igualaron su mejor actuación histórica en Series Nacionales , resultado que les sirvió para estar entre los seis mejores equipos del país y clasificar a la Segunda Liga Élite de Béisbol.
Llegaron a este evento con la etiqueta de » no favoritos» pero subserie tras subserie demostraron que un equipo no se hace de nombres sino de hombres , juego a juego , inning a inning, lograron la clasificación a la final y estar entre los dos mejores del país .
Milagro dijeron algunos , casualidad otros pero este que les escribe no está de acuerdo pues conoció de primera mano las interioridades de un conjunto que admiran al alquízareño como un DIOS , le quieren, le respetan y le siguen pues ha sabido sacarle el extra a todos.
Hoy fueron recibidos por el pueblo artemiseño , después de ganarse su pase a la final frente a los Industriales de La Habana .
Todos querian saludar a sus héroes , obtuvieron el mejor resultado histórico de la provincia en eventos de primera categoría.
Yulieski se dirigió a los reunidos en el parque Libertad y sus lágrimas de emoción impedían por momentos sus palabras , agradeció el apoyo del » jugador número 10 » como él califica al público , me sentí honrado de vivir ese momento , orgulloso de lo hecho hasta ahora y no pude evitar que una lágrima también corriera por mi mejilla, miré a todos lados preocupado de que alguien lo notara pero al girar la cabeza vi muchas lágrimas y entendí , cómo no llorar cuando un dios llora.
Fotos: Otoniel Márquez
