Hoy lo lleva un gigante de nombre Erly que con el número 52 en la espalda se ha ganado el corazón de todos los artemiseños.
¿Cómo no admirarlo cuando fue parte importante en la clasificación de los Cazadores a la gran final de la Segunda Liga Élite del Béisbol Cubano?
Todos recordamos sus excelentes actuaciones y muchos cuestionaron el porqué lanzaba solo de local cuando tanta falta le hacían sus buenas actuaciones monticulares al equipo.
Lo que pocos sabían es que Erly, libraba una batalla junto a su esposa, la más cruel de las batallas, una lucha que le arrebató a su compañera de vida, la madre de sus hijos.
Este lamentable suceso lo alejó del box en la etapa semifinal de la élite y parecía que al menos para él, todo había terminado pero, la estirpe de su apellido, el valor de quien se sabe necesario hizo lo suyo y obró el milagro.
Regresó al lineup de los Cazadores, pidió la pelota a Yulieski González y le dió una clase magistral de pitcheo a la poderosa batería matancera.
Lanzó el juego completo y regaló la victoria 3 carreras por 2 a los Cazadores de Artemisa para empatar la final y mantener vivas las aspiraciones de un equipo que lo acogió como uno más.
Gracias Erly, hoy te convertiste en un coloso y desde el cielo tu amada te mira agradecida.
Bravo 💪💪💪
Excelente artículo homenajeando a un hombre digno, hijo de su padre El Señor Pelotero (Luis Giraldo Casanova Castillo). Claro que esa estirpe pinareña y pasión por Artemisa le hizo enviar un enorme corazón desde el 26 de Julio al cielo….para que su amada esposa se sienta viva por siempre en su corazón!!