Vamos a hacer una conexión en serie y medir el voltaje, indica el profesor a los estudiantes. La orientación es principalmente para Luis Michel, quien aguarda a su lado, junto al banco de prueba de simuladores. El muchacho vence el miedo escénico ante un auditorio más amplio de lo habitual: a sus compañeros de clase se han sumado otros maestros y visitantes.
Toma los cables y comienza la conexión. Luego de hacerlo, acopla el voltímetro. Mientras, el profe enfatiza en conceptos básicos impartidos en teoría: qué es una conexión en serie, para qué se usa, qué mide el voltímetro…
Los alumnos permanecen atentos, no solo por el hecho de que hay visita, no; equipos tan modernos y nuevos dan deseos de aprender Electrónica.
Pioneros de un nuevo perfil
La clase acontece en el Instituto Politécnico Agropecuario (IPA) Batalla de El Rubí, en San Cristóbal. Allí 15 adolescentes son pioneros en el estudio de Técnico Medio en Electrónica, especializados en Energía Solar, un sueño que recién comienza a materializarse y al que mucho ha contribuido la ONG alemana KarEn, cuya vicepresidenta, Gerda Daenecke, ha visitado en varias ocasiones la institución.
“Siempre ha mostrado interés en ayudarnos. La escuela recibió una bomba de agua sumergible que funciona con energía solar; otras celdas fotovoltaicas para la electrificación de parte del centro; una tela para cultivo protegido, entre otros recursos”, explica Lidia Bazar Lezcano, la directora.
También impulsó la idea de un círculo de interés acerca de la energía solar, con la perspectiva futura de abrir la carrera de Electrónica, con especialización en ese perfil y formar fuerza de trabajo calificada para el montaje y mantenimiento de paneles solares, existentes en disímiles asentamientos montañosos de difícil acceso en los municipios de San Cristóbal, Candelaria y Bahía Honda, iluminados gracias también a la colaboración internacional de KarEn.
El círculo de interés funciona en Batalla de El Rubí hace tres cursos. Lo han conformado alumnos de diferentes tecnologías, quienes han participado en la instalación de celdas fotovoltaicas en la escuela y en las montañas, junto a trabajadores de Copextel; entre otras actividades.
Finalmente, este curso inició la especialidad que tiene enamorados a unos quince adolescentes y sus profesores. Sí, los del ejercicio con simuladores en el laboratorio.
“Atrapados” en los circuitos
La carrera de Electrónica existe hace algún tiempo en la Enseñanza Técnico Profesional -en el caso de la provincia en el politécnico Juan Manuel Castiñeiras, de Mariel-; mas no con esta especialización.
“KarEn trajo el programa de las asignaturas específicas, incluso los ejercicios para el trabajo en los laboratorios. Y profesores alemanes capacitaron a tres docentes nuestros que ya imparten dichas materias”, refiere Lidia.
Apenas dos meses de estudio acumulan los primeros pupilos, pero su entusiasmo es visible. “Me gusta desde que inicié. He aprendido a usar los voltímetros y próximamente sabremos construir diferentes tipos de circuitos, las inclinaciones de los paneles y mucho más”, dice Magdiel Alfonso Alonso.
Hasta hace poco tiempo, la mayoría de las lecciones habían sido teóricas; recientemente, comenzaron también en el laboratorio de Electrónica. Allí el profesor Saúl Ledesma procura que los muchachos interioricen conocimientos mientras los explica en la práctica, ayudado por los profes Félix Julián Zubizarreta e Inés María Conde.
“Es tecnología de punta; contribuye a una mejor formación. Hasta los docentes estamos impresionados. Agradecemos a KarEn que los donó y nos facilitó la superación para poder usarlos en el proceso de ense- ñanza-aprendizaje con los alumnos”, asegura Saúl.
Banco de pruebas de simulación, módulo fotovoltaico, maletas con herramientas y dispositivos de trabajo, cuadernos de anotaciones y otros materiales gastables, conforman un cúmulo de recursos que bien utilizados pueden contribuir considerablemente a la formación de técnicos.
Inés María Conde, ingeniera eléctrica y docente por más de diez años en ese centro, muestra orgullosa un medio de enseñanza confeccionado por tres de los alumnos, que representa el funcionamiento de un panel solar.
“Basado en lo aprendido en clases, construí una casita electrificada con un panel. Usé luminarias led, pequeñitas, para la iluminación interior. Pensé colocarle solo dos, pero el voltaje de la pila que usé como batería era muy alto. Me di cuenta de que si colocaba más ledes en serie, no se calentarían ni fundirían, y eso hice”, expone Luis Michel Díaz Piloto, uno de los creadores del medio de enseñanza.
Aulas afuera
En un área a cielo abierto en la pro- pia escuela, los profesores muestran cómo usar distintos dispositivos de la maleta de trabajo en el campo. No es un sitio exterior cualquiera: allí están emplazadas seis celdas fotovoltaicas que entregan electricidad a la bomba de agua sumergible. Los docentes aprovechan el escenario para explicar detalles de la colocación de los paneles y el funcionamiento de los sistemas fotovoltaicos, en general.
Aunque formado inicialmente en Computación, la capacitación recibida le permite al profe Félix Julián desenvolverse en la Electrónica. Enseña a los muchachos el uso del multímetro; explica la función del inversor y otras tantas cosas. No obstante, pronto se desempeñará nuevamente en su perfil gracias a los equipos que llegarán para un laboratorio de computación, fruto también de la colaboración de KarEn.
Las actividades de este tipo serán más intensas en el período de práctica laboral, en diciembre. “Durante dos semanas permanecerán más tiempo en laboratorio y probablemente acompañarán a trabajadores de Copextel en el mantenimiento de sistemas fotovoltaicos en las montañas”, avizora Inés María. Incluso gestionan una visita a Componentes Electrónicos, en Pinar del Río, fábrica donde se ensamblan los módulos de paneles solares.
Profesores y alumnos concluyen las lecciones, pero solo por este día. Entusiasmo, deseos de enseñar y aprender se advierten en estos protagonistas de la enseñanza de la Electrónica con un enfoque pionero hacia la energía solar, en un país que apuesta cada vez más por el uso de las energías renovables y tan expuesto al astro rey. Quién sabe si sean ellos el cimiento para que un futuro próximo surja una carrera de estudios propia de esa materia.

EN EL LABORATORIO, el profe Saúl orienta montar un circuito en serie / Foto: Otoniel Márquez

EL PROFE Félix Julián explica a los estudiantes el funcionamiento de varios dispositivos de trabajo en el campo / Foto: Otoniel Márquez
