La filial provincial de la Asociación de Pedagogos de Cuba (APC) entregó el Premio Yo soy el Maestro al doctor en ciencias militares Enrique Garcés Montero, un hombre enamorado del magisterio por el ejemplo de sus padres, quienes solo habían llegado hasta cuarto grado, y así le enseñaron a leer y escribir en el poblado de Mabay, en Granma.
Durante el balance de la organización, previo al sexto congreso de esa sociedad científica entre el cinco y el ocho de diciembre, se entregaron también los galardones nacionales Gloria Guerra Menchero, por el trabajo con el adulto mayor, y Familia Educadora, al profe Ismael Martínez López, de Güira de Melena, y los Puentes Noroña, en Bahía Honda, respectivamente.
Asimismo, el municipio de Bauta recibió el lauro a ese nivel José de la Luz y Caballero en la categoría de estudiante, reconocimientos que se suman a un grupo de personas e instituciones distinguidas en la labor educativa.
Rubens Correa Díaz, ratificado como presidente de la filial de la APC en el territorio, presentó en un informe principales aciertos y deficiencias, entre estas la importancia de incorporar nuevos miembros de la Escuela Pedagógica, la escasa presentación de expedientes de propuestas a premios provinciales y nacionales, y la falta de actividades para estimular a los asociados.
Mildrey Clavel Meralla, metodóloga provincial de Español-Literatura y presidenta de la Comisión de Perfeccionamiento y Superación en la filial, propuso incrementar el vínculo con las comunidades y los maestros incorporados a otros sectores de la economía.
Asimismo, Gilberto Millán Saro, presidente del Consejo Científico, abogó por implementar cursos de superación sobre metodología de la investigación y escritura de textos científicos, en aras de la calidad del proceso docente-educativo.
Rayko Molinet Herrera, miembro de la Junta Directiva Nacional, exhortó a los artemiseños a consolidar su quehacer, pues nos sobra tradición en materia de buenos educadores. Es el caso del guanajayense Juan Fermín González Loza, propuesto al Premio de la Dignidad Educativa, reconocimiento que se entregará por primera vez, para homenajear la consagración frente a las aulas.