Aunque de manera general el país intenta bancarizar la mayor parte de los sectores, en el caso de la Agricultura en Güira de Melena hay muchos asuntos pendientes de solución para que el proceso avance, sobre todo por la gran cantidad de trabajadores del campo que deben incluirse también.
Entre los elementos que atentan contra la inclusión de estos en el proceso está la baja disponibilidad de teléfonos móviles inteligentes en manos de estos trabajadores; la mala o nula conectividad en las zonas rurales y la inexistencia de cajeros automáticos que garanticen la extracción de al menos un mínimo de efectivo para los gastos diarios que no aceptan transferencia.
Miguel García Véliz, director de la Empresa Agropecuaria de Güira de Melena, explica que ya se ha avanzado en la entrega de tarjetas magnéticas a trabajadores de la empresa propiamente, pues aun quienes laboran directamente en el campo exigen su pago en efectivo.
Pablo Orlando Pérez Guzmán, presidente de la Cooperativa de Crédito y Servicios Frank País, añade otras limitantes: si se tienen 25 trabajadores, al momento del pago no se pueden hacer 25 transferencias. También los límites a transferir constituyen un freno pues en un día pueden llegar a pagar hasta 100 000 pesos y la realidad solo permite llegar a 80 000.
La compra de determinados insumos, que no vienen por la vía de Gelma, también es otra problemática que atenta contra la incorporación total del pago por transferencia.
Omar Barroso Miranda, presidente de la Cooperativa de Producción Agropecuaria Niceto Pérez, agrega la necesidad particular de su cooperativa de agilizar la entrega de tarjetas magnéticas solicitadas por sus trabajadores, para intentar unirse al proceso.