Esta vez el premio llegó en nombre del barrio. El coronel Enrique Garcés Montero, doctor en Ciencias Militares, escritor, profesor e investigador titular, mereció el galardón anual de los Comités de Defensa de la Revolución en un acto a propósito del Día de la Cultura Cubana, celebrado en su segunda Patria: Guanajay.
Su prolífera trayectoria en la mayor organización de Cuba, le permitieron recibir de manos de Ania Thompson, coordinadora provincial de los CDR el Premio del Barrio, reconocimiento que también fue entregado este año al Comandante del Ejército Rebelde José Ramón Machado Ventura, y a otras personalidades e instituciones del país.
«Yo sigo siendo el mismo guajiro de siempre, y este premio no se divide entre mis dos barrios Mabay, en Granma, y Guanajay, en la provincia de Artemisa. Se multiplica porque hay sangre de las dos tierras corriendo por mis venas», aseguró Garcés Montero.
«Jamás esperé tan alto reconocimiento, debo decirlo. Por muchos años he trabajado directamente con mis vecinos y los barrios en ambas provincias. Mis libros están dedicados a hombres que salieron de sus hogares a escribir la historia de la nación y lo lograron. Fueron testimonios inéditos donde no le faltaron líneas a la familia y a la vecindad», destacó en entrevista ofrecida a este reportero.
Un proyecto de desarrollo local en el barrio en transformación Primero de enero de Guanajay, vinculó a la Universidad de Artemisa a través de Garcés con las principales políticas establecidas en Cuba para revitalizar estos lugares. Estudió junto a otros especialistas del Centro Universitario del territorio los aspectos puntuales que llevarían al éxito tan importante misión. Tiempo después representó a la provincia en la V Conferencia Internacional “Por el equilibrio del mundo», para compartir las experiencias alcanzadas.
Más de 70 donaciones de sangre, la distinción 28 de septiembre, el Sello Conmemorativo “20 años de Vigilancia Revolucionaria” y un amplio hacer como delegado de circunscripción también se suman a la vida del coronel Garcés. Asimismo su participación en procesos electorales y apoyo inigualable a la contención del virus de la COVID 19 en la etapa más compleja en la Villa Blanca.
Abuelo, padre y esposo dedicado, sin dejar de mencionar su singularidad frente a las aulas, son rasgos que componen a un ser humano «de pueblo», incapaz de renunciar al interés del barrio y a cuánta tarea lleve su nombre. Enrique Garcés Montero, de aquí y de Granma, recibe hoy tan alto premio, como las Palmas cubanas, como su obra.