Cercanos ya a la etapa estival, en Güira de Melena, sectores como Comercio, Gastronomía, Cultura y Deporte, preparan el plan de actividades y servicios para la población de todas las edades, un empeño que si bien no satisface todas las expectativas, es la clara expresión del esfuerzo por hacer de los meses de verano una etapa agradable.
Desde la Cultura preparan actividades que fomenten el gusto por las artes y eleven el nivel cognitivo, como las caravanas culturales en los distintos consejos populares, tanto urbanos como rurales. Estos espacios permiten acercar las manifestaciones artísticas a la población, a través de pinceladas de danza, música, literatura y teatro.
De manera general, en la sureña localidad cada verano son habituales las peñas, los conciertos, los guateques campesinos, las lecturas y los talleres de la Casa de Cultura Ignacio Cervantes, a cargo de artistas profesionales y aficionados del territorio.

Instalaciones como la Biblioteca Liliana Dimitrova, el Museo Juan Manuel Sánchez Amat o la Galería de Arte Emilio Rivero Merlín, priorizan muestras de personalidades significativas o de artistas del municipio para fomentar la historia y el talento locales.
La Plaza Niceto Pérez es uno de los espacios donde también concurre gran parte de la población, sobre todo cuando se presentan artistas en conciertos o cuando en la jornada dominical es la anfitriona de actividades mancomunadas entre Deporte y Cultura.
El deporte funciona de manera similar, con caravanas deportivas que incentivan la práctica de ejercicios físicos, no solo en las instalaciones deportivas sino en los propios consejos populares, con planes de la calle.



Hasta ahí lo que corresponde a las instituciones, pero en la otra cara de la moneda estamos quienes disfrutamos de todas esas actividades, no siempre desde el comportamiento responsable. Es usual ver cómo quedan desaliñados estos espacios luego de una actividad recreativa, con basura por doquier y hasta uno que otro implemento deportivo roto.
Respetar a artistas, promotores culturales y deportivos y a los propios pobladores que asiste a estos espacios al aire libre o cerrados es tan necesario como evitar la ingestión de bebidas alcohólicas, sobre todo aquellas que se expenden en botellas de cristal. Y si hablamos de una actividad infantil, siempre será prudente evitar su venta para quienes deben cuidar de los menores.
Hemos de velar también por esa música estridente que molesta a los vecinos y contribuye a la contaminación sonora hasta altas horas de la noche. Aunque para algunos el verano sea etapa de receso laboral, son muchos los que siguen trabaando desde bien temprano para asegurar las tareas vitales y merecen un descanso adecuado, más los ancianos y niños pequeños, para quienes el ruido resulta más molesto.
Vale entonces responder este verano con disciplina a toda esa planificación y velar por el cuidado de los espacios públicos y las instalaciones a las cuales asistimos.
Es importante no arrojar basura fuera de los colectores, pero también es relevante revisar la existencia de estos. Urge respetar la higiene dentro de cada local que visitemos, no solo porque esto sea parte de la educación formal, sino por el hecho de que así alargamos su vida útil.
Mantener las instalaciones activas, limpias, bien cuidadas y disponibles para utilizarlas nuevamente es tarea de todos este verano. Julio y agosto son meses para disfrutar y recrearse, pero con respeto y educación.

