¿Quién leyó a quién? Tal vez fueron los Cazadores, que quisieron corresponder al mensaje de confianza de este amante del béisbol. O quizás fue el propio periodista quien supo apreciar que no siempre se gana, pero la voluntad termina por deparar victorias.
Lo cierto es que, apenas unas horas después de dedicarles unas líneas de fe, de un “me quedo con lo mejor de los Cazadores, ciertos chispazos que un día pueden encender el gran motor de la maquinaria entera, con la combatividad y la confianza en cuanto puede lograr su mánager”, este lunes hilvanaron par de triunfos contra Villa Clara.
Desde luego, ¿cuáles sino los brazos certeros de Yunieski García y GeonelGutiérrez, conducirían a los anfitriones a bajarles los humos a sus huéspedes?
A las 10:00 de la mañana comenzó el toque de silencio. Tras un choque dominical en que los Leopardos dispararon 19 jits y anotaron 12 veces, el diestro de San Antonio de los Baños les recetó siete ponches, espació cinco sencillos, no regaló bases por bolas… y les colgó un cero tras otro a losnaranjas, hasta completar su juego.
Seis imparables les bastaron a los nuestros para fabricar las únicas dos carreras del choque, dos a cargo de Osbel Pacheco, en tanto Carlos de la Tejera (con doble) impulsaba a José Antonio Jiménez.
En el segundo partido subió al montículo el zurdo de Artemisa, quien permitió una anotación en la primera entrada y otra en la segunda; ya en la tercera, la tropa del director Ramón Moré abrió con su sexto indiscutible, pero, a partir de entonces, GeonelGutiérrez domesticó a los felinos cual si fueran mansos gaticos.
A ritmo de ocho ponches y un único boleto, el domador no dejó que los Leopardos volvieran a sacar las uñas, a excepción de un jit en el inning de despedida; entretanto, los de casa batearon 16 y concretaron ocho carreras. Esta vez los Cazadores ataron cortico a su presa.
Gracias a la provechosa jornada, los pupilos de Yulieski González mejoraron su balance a seis ganados y siete perdidos, ¡y ascendieron al décimo escaño!, a un juego de diferencia de los puestos de clasificación a los playoff.
Por eso este equipo y su director merecen toda la confianza. Ahora precisan que el resto del staff de lanzadores se sume a la pelea… ¡y que suenen los bates!