Finca Marta sabe que funda, inspira y multiplica, que es sensibilidad y voluntariosa pasión, que ni en el cielo están sus límites para concretar sueños, sobre todo con los pies en la tierra; tal vez por eso el Ingeniero Agrónomo Fernando Rafael Funes Monzote, su líder, la tildó con nombre de mujer, el de quien le diera la vida y dedicara parte de su existencia a la agroecología en Cuba.
En sugerente armonía con el Proyecto Familiar que hace diez años pinta de verde ocho pedregosas hectáreas de tierra en Caimito, celebramos el Día Internacional de la Mujer.
Fue un domingo ecológico que se adelantó al martes 8 de marzo, pues allí cuenta la impronta, mano a mano con el resto del colectivo, de una veintena de féminas mezcladas con la agricultura, la horticultura, la apicultura, la ganadería, la fruticultura…
Junto a diversas opciones compatibles con Finca Marta, hoy una de las 1 400 Mipymes cubanas, impactó la venta de acelga, apio, ajíes, piña, miel de abejas, agua de coco, albahaca, brócoli, cilantro, acelga… más otras cosechas, que entre noviembre y abril visualizan su mayor esplendor.
Buenas prácticas, ejercicio de yoga, un ambiente sano, hamacas rústicas, historias de trabajo, sudor, ciencia y tradición, posturas y semillas para seguir procreando tal cual instinto de mujer, y los deseos de extender la vida con hábitos alimenticios capaces de hacerla próspera y sustentable en torno a la tierra, motivaron la jornada.
Afloraron recuerdos, anécdotas y desafíos del colectivo de casi una treintena de trabajadores, liderados por el también Doctor en Ecología de la Producción y Conservación de Recursos, con la complicidad de su esposa Claudia, sus hijos, y la compañía de una empoderada, Sara, la “Patrona”, delegada, vecina y ganadera, mujer de temple y ejemplo para todos.
Cada quien llevó a casa cuanto quiso y pudo, sobre todo en enseñanzas de quienes no creen en muros, de una finca con nombre de mujer, que como las cubanas, se refugia en sus fuerzas para hacerlo todo posible.
En una provincia como Artemisa, cuyo nombre también se presume sea por una mujer, somos féminas el 49,7 % de su población total; ellas ocupan el 72,8 de los cargos de dirección, además son mayoría en Educación (63,5%), Salud Pública (67,4), Ciencia y Tecnología (67.37) y el trabajo por cuenta propia (65,9$%): más que privilegios orgullos, que como Finca Marta, matizan este 8 de marzo.