La Empresa de Acopio y Beneficio Lázaro Peña cuenta con lo necesario a fin de cumplir con la siembra de las 510 hectáreas previstas para la campaña 2021-2022, sobre todo las posturas cultivadas bajo los estándares de calidad que han demostrado tener las bandejas flotantes.
Dorelis Báez, directora adjunta, asegura que tienen posturas adicionales para cubrir cualquier incidente y no se comprometa la productividad. También están garantizadas las actividades en cada etapa del cronograma, como la roturación de suelos, lograda en su totalidad.
Reconoce, sin embargo, como algo que arriesga los rendimientos de la campaña, la falta de treflán para el control del Orobanche, una planta parásita que incide directamente en el cultivo y le ocasiona considerables daños.
Asimismo, alude al déficit de productos para enfrentar el moho azul, la enfermedad más devastadora del tabaco.
Otros insumos pudieran complicar el buen desarrollo de la zafra tabacalera, entre estos el combustible, imprescindible en el proceso en las cámaras de cura controlada.
Como en otras empresas del país, la Lázaro Peña carece de gomas para los tractores y otras partes y piezas que garanticen la explotación al máximo de la maquinaria.
No obstante, la siembra avanza sin dificultades; entretanto, se completa el ciclo de la campaña 2020-2021,cuando acopiaron 675 toneladas (90% del plan), con un rendimiento promedio de 1.14 por hectárea.
Sobre la entidad recae el compromiso de 132 toneladas de capa para la exportación, tarea que deben cumplir sin dificultades a mediados de mes, al concluir la etapa de beneficio, refiere la directora adjunta.