La Federación Internacional de Judo (IJF, por sus siglas en inglés) acaba de anunciar el inminente regreso a la acción en este deporte, con el cierre de la gira mundial y un trío de citas de altísimo nivel, a partir del Grand Slam de Budapest, Hungría, en octubre.
Según el sitio web de la IJF, a ese certamen le seguirá otro Grand Slam, aun más fuerte, sobre todo por la elevada concurrencia de judocas nipones, el de Tokyo, Japón, en diciembre. Y 2021 iniciará con el Masters en Doha, Qatar.
Los tres eventos ofrecerán puntos para la clasificación a los Juegos Olímpicos de Tokyo, el venidero año, además de disímiles torneos que planificará cada continente antes de finalizar el 2020.
“La salud de nuestra familia del judo es de máxima importancia, y nos aseguraremos que la situación tanto local como global sean tomadas con la más cuidadosa consideración al planear cada evento”, advierte la nota.
En correspondencia, la IJF ya publicó sus protocolos para reiniciar las competencias, como requisito obligatorio para organizar eventos durante la actual pandemia. “A la par, vigilaremos de cerca la situación mundial y nos reservamos el derecho de corregir el calendario y el estado de la clasificación, en favor de preservar los mejores intereses de los atletas como primera prioridad”.
“Existen algunos territorios que ya pueden celebrar torneos: Hungría está lista para acoger su Grand Slam a finales de octubre, con todas las medidas y la protección necesarias”, indicó Marius Vizer, presidente de la Federación Internacional de Judo. “Estamos forjando un equipo que se encargará de la seguridad de todos los participantes en los próximos eventos”, enfatizó.
Resta confirmar ahora si algún judoca cubano intervendría en estas lides. La candelariense Idalys Ortiz, triple medallista olímpica, bicampeona mundial y líder del ranking del planeta, aún no lo ha definido.