El frijol negro, alimento de alta demanda y poca oferta en estos tiempos, se cosecha entre septiembre y noviembre de cada año, pero la mayoría de las plantaciones fueron atacadas por un insecto conocido como trips de las flores de frijol, y en Artemisa hubo quien lo acaparó para revenderlo por encima de 25 pesos la libra.
Sin embargo, la fuerza de la justicia evitó semejante lucro. Por estos días a un ciudadano le fueron decomisados en su vivienda 51.18 quintales del grano, unos 150 sacos, los cuales se vendieron a 10 pesos la libra, este sábado, en el Mercado Agropecuario Estatal (MAE) de la ciudad cabecera, para beneficiar a unas 1 000 personas a razón de cinco libras per cápita.
Ana María Peñalver fue de las favorecidas; por vez primera compraba frijoles este año en el mercado, en coincidencia con Ismeil Valdeira, quien se trasladó desde el consejo popular Toledo para hacer sus compras a mejores precios que en otros kioscos y placitas, aseguró.
Eduardo Perea Rodríguez, administrador del MAE, explicó que esa recaudación se ingresa al presupuesto del Estado. Refiere haber vendido productos decomisados en otros tiempos, pero ahora con mayor sistematicidad, lo que denota el enfrentamiento a quienes especulan con la necesidad de otros.
“También por decomisos, la última semana vendimos a precios topados unas 100 libras de ajo, 35 quintales de boniato, unos 30 de malanga, aguacate, calabaza y plátano, entre otras producciones que pretendían revender en La Habana.
“Contamos con otras ofertas de gran aceptación, como las pulpas de mamey, guayaba y frutabomba, jugos naturales, elaboraciones de varias minindustrias de la provincia y, por supuesto, cultivos varios que agradecemos principalmente a las entregas de la CCS Rigoberto Corcho y nuestro suministrador Acopio”, asegura.
