Julio y agosto son, irremediablemente, los meses más veraniegos de los cubanos, y aunque la COVID-19 aún asoma como un peligro, habrá que acompañarlos con diversión, paseos, entretenimientos…, sin dejar atrás el nasobuco; pretexto para la muestra colectiva expuesta en la galería de Arte Angerona, de la ciudad de Artemisa.
Se unieron tres grandes del humor gráfico: el marieleño Brady Izquierdo y el ariguanabense Ángel Boligán, más el habanero Arístides Hernández, quienes desde la universalidad de su ingenio con el arte y el humor, graficaron cómo esa pequeña y utilitaria prenda nos salva de la pandemia que ha cobrado y cobra millones de vidas en el mundo entero.
Humor con nasobuco, llega a nuestros predios para recrear, pero sin disociarnos del necesario pensamiento a favor de la protección individual. Abrió las puertas este sábado con un mínimo de presentes, más bien diría que entre colegas y directivos de Cultura, pues no es posible aglomerarnos, pero de martes a domingo sí está abierta a los artemiseños que deseen veranear, pensar y reír, siempre con nasobuco.
Denys San Jorge, director de la institución cultural, sita en calle 33, entre 50 y 48, reconoció el talento de los tres artistas, y de otros tantos indetenibles en su andar a pesar del aislamiento, mientras invitaba a sentir en la muestra un reconocimiento a los Salud Pública, quienes no descansan hasta vernos a salvo del nuevo coronavirus.
Al unísono de la inauguración de Humor con nasobuco, playas, centros recreativos y comerciales de la provincia, incluyendo instalaciones turísticas, daban la bienvenida a la etapa estival, que desde su propio lema, lleva mucho de conciencia, Verano por la vida.
