Una luxación del codo derecho privó a la candelariense Idalys Ortiz de continuar en competencia en el Grand Slam de Tel Aviv, Israel, según indagó el colega Joel García con el médico de la delegación cubana.
Ya había debutado con éxito por hansoku-make frente a la mongola Nominzul Dambadarjaa, en menos de tres minutos.
Después, en cuartos de final, tuvo que abandonar el combate ante la turca Kayra Zayit en el minuto 2:44, y fue decretado el kiken gachi.
A continuación, no se presentó al repechaje frente a la anfitriona Yuli Alma Mishiner, lo cual le deparó el séptimo lugar en el evento.
Medios de prensa destacan que, para nuestra campeona olímpica, esta fue apenas la séptima vez sin medalla en 24 incursiones en Grand Slam.
La local Raz Hershko venció a Sayit en la final, en tanto la serbia Milica Zabic y la holandesa Karen Stevenson quedaron en bronce.
Hubiera sido una excelente oportunidad de revancha para Idalys ante Hershko, tercera en el Masters de Jerusalén y quien la superó en el Mundial de Tashkent.
De todos modos, el Grand Slam israelí es solo parte de un extenso cronograma que contribuirá a la mejor forma deportiva de las cubanas, con la mira puesta en certámenes múltiples, como el Mundial de Doha, los Centroamericanos y del Caribe de San Salvador, los Panamericanos de Santiago de Chile… y los Juegos Olímpicos de París, en 2024.
Ahora la muchacha del barrio Godínez, en Candelaria, habrá de permanecer unas semanas en proceso de recuperación.
En el horizonte aparecen los Grand Slam de Tashkent, Uzbekistán (3-5 de marzo) y Tbilisi, Georgia (24-26 de marzo), los abiertos de Medellín y Varadero, así como el clasificatorio en Santo Domingo para los Centroamericanos.