Acabo de ver a unos chicos volverse más poderosos que un gigante.Los muchachos de Artemisa vencieron a quienes reinaron durante tres años en Cuba. A estos Gladiadores ni el mismísimo César los iba a apartar de su sueño. Sobre el césped del Coliseo local estaba el grandísimo Santiago: la muerte quiso sonreírles… y le devolvieron la sonrisa.
Sus rivales les habían tendido una emboscada allá, en el césped sintético de la tierra caliente. Pero apenas pudieron asestarles un golpe: el marcador de un gol por cero demostró no ser suficiente para intimidarles y, al regresar a Grandes Alamedas, tomarían revancha.
Ya los Diablos Rojos no podrían utilizar su “arena” como el jugador número 12. En cambio, Artemisa los esperaba justo donde resultan invencibles: en su “teatro de los sueños”, esta vez más abarrotado que nunca.
De adversarios como ellos solo cabía esperar una lucha sin tregua. Lo atestiguaron los 24 saques de esquina, las cinco tarjetas amarillas y hasta la expulsión de un gladiador.
El público enardecido parecía tomar espada, lanza y escudo… y pelear junto a los suyos. Al minuto 18, sus cánticos e ilusiones fueron premiados con un gol ¿de quién sino de Yasnay Rivero, el más certero del torneo? El 9 artemiseño ha perforado redes en 21 ocasiones.
Por doquier saltaban chispas en cada choque de intenciones. Ataques, contragolpes, disparos, estrategias, defensa con todas las armas posibles, pundonor, coraje, ganas… En Orlando Calvo, Darío Ramos y Osmín Hernández se estrellaban las embestidas del enemigo, mientras los puntas procuraban finiquitar el encuentro.
Así transcurrieron 90 minutos, y hubo que continuar el combate, pues cada cual tenía su gol. En los 30 minutos adicionales, los dirigidos por Reinaldo Torres perdieron a uno de sus hombres, de modo que el desgaste les mermó ostensiblemente. Solo la determinación y la fe sostenían sus piernas. Solo la convicción blandía el escudo.
¡Y llegó la tanda de penales! ¿Serán el entrenamiento y la técnica los que deparan victorias? ¿Acaso la inteligencia? ¿Cuál es la mejor arma de todas? Justo cuando cada músculo está a punto de ceder; cuando los nervios presionan, arrugan, entorpecen, algo fortalece esa patada decisiva.
De ese algo fabuloso y real, de esa sangre fogosa y helada a la vez, están hechos los Gladiadores. Por eso Orlando, Osmín, Pedro Bravo y Yasnay clavaron lanzas una por una al cancerbero de Santiago, hasta que uno de ellos, Yasmani Feraud, falló: Diosvelis Guerra le paró su disparo. Entonces Fredy Junior Suárez asestó la estocada final a los Diablos Rojos.
Cuba tiene un nuevo campeón.¡Artemisa ganó el Torneo Clausura de la 106 Liga Nacional de Fútbol, su primer título en estas lides! Es una hazaña, pues, en los 12 años que pronto cumplirá la provincia, nunca antes consiguió coronarse en primera categoría en deportes colectivos.
Quizás su reinado apenas comienza. He visto a unos chicos volverse más poderosos que un gigante.