El judoca ariguanabense Omar Cruz León, de la división de más de 100 kilogramos, sigue brillando con luz propia en los escenarios internacionales.
Ahora hizo la cruz en la Copa Panamericana Junior disputada en República Dominicana, con el único oro de la reducida delegación cubana a la cita.
Omar puso ritmo cubano a los tatamis en Quisqueya. Demostró estar hecho para empeños mayores. Fuerza, rapidez en el agarre de la solapa del local Julio César Javier Arias y una técnica depurada, regalan al ariguanabense el segundo mejor resultado de 2022, con este ippon en 30 segundos.
Cuba sumó tres platas por intermedio de Blanca Cabrera en los 52 kilogramos, Idelannnis Gómez en 70 y Kimy Bravo en los 66, en un evento que reunió a 90 atletas de 14 países.
Este certamen sirve de preparación al artemiseño, con vistas al Mundial de mayores durante la primera quincena de octubre en Uzbekistán.
Especialistas y entrenadores lo alistan y confían en él para obtener preseas.
Este mismo año, Omar fue subcampeón mundial juvenil en la cita de Guayaquil, Ecuador, al perder en la final por regla de oro ante el japonés Yuta Nakamura, y subió a lo más alto del podio en los I Juegos del Caribe de Guadalupe. Antes, había conquistado el título en los Juegos Panamericanos Junior de Cali-Valle 2021.
Y al cierre de esta edición, en el Abierto Panamericano para mayores, en Santo Domingo, República Dominicana, se colgó al cuello la medalla de bronce, luego de ganar en su primer combate al costarricense Issac Meléndez por ippon, caer en semifinales ante el chileno Francisco Solís por la misma vía, y desquitarse con ippon al venezolano Luis Amezquita en la discusión por el tercer puesto.
