Según la Real Academia de la Lengua, el término maracuyá proviene del portugués maracujá, y designa la fruta tropical y la planta de igual nombre. La conocen también como fruta de la pasión. Muy gustada para jugos y postres, aunque no es tan consumida en su forma natural.
Aromática, ácida y de un sabor peculiar, te invitamos a hacerla jugo. Corta a la mitad y extrae la pulpa. Mezcla en la batidora con agua y azúcar. Cuela.
Añade hielo si prefieres tomarla bien fría. Puedes acompañarla con mango, pues ambas frutas se complementan a la perfección: sigue el mismo procedimiento, solo añade el mango.
Si deseas algo un poco más exótico, sustituye el agua por leche o yogur. Las mezclas pueden ser infinitas: igual combina con zanahoria o frutabomba. ¿Otras opciones? Panetela, helado casero o paleticas.
A cargo de Giselle Vichot Castillo y Yailín A. Chacón Guzmán