San Antonio de los Baños tejió su historia sobre las aguas del Río Ariguanabo, mucho antes de su fecha fundacional (1794), cuando sus tierras eran abordadas por comerciantes españoles (1760) que incrementaron la construcción de barcos ante la inminente guerra con Inglaterra.
El afluente, incluido en el área Paisaje Natural Protegido Valle del Ariguanabo, nace de sus propios manantiales y se desplaza de norte a sur, con travesía por el centro urbano del pueblo, como buscando complicidad de los moradores, que convirtieron su existencia en identidad y gentilicio.
El pensamiento del trovador
Muchas de las canciones de Silvio Rodríguez lo atrapan en esa niñez feliz en las márgenes del Río, en esta tierra con aroma a la que siempre retorna, ahora como miembro activo de la Fundación Ariguanabo.
Menciona el cantautor la primera vez que acudió a una escuela pública, la #3, según le recuerda su compañero de aula, el Doctor en Ciencias Giraldo Alayón.
Y piensa Silvio en voz alta que “si la maestra hubiera colocado encima de su mesa una plantica, y cada día enseñara a sus alumnos a regarla y los incitara a tener una en casa, porque es un ser vivo, que es preciso alimentar con Sol, agua y cuidados… si todos los niños empezaran su educación así, muchos problemas de hoy se podrían evitar”.
Pasito a pasito
La dirección de Ciencia Tecnología y Medio Ambiente (Citma) llega a los planteles educacionales. Vivian Fonseca Rodríguez, jefa de sección del Citma en San Antonio de los Baños, alude a la creación de círculos de interés en 11 de los centros educativos, donde realizan labores de capacitación, reciclaje y manualidades, visitan el área protegida y participan en concursos y talleres.
Habla también de los dúos de formadores ambientales y del apoyo de los instructores de arte.
Vertederos contaminan y afean
Rumbo a La Quintica, por su entrada principal, la basura colma la amplia vía de acceso. Al ver la cámara fotográfica, los vecinos se aproximan y exclaman “¡ese basurero lleva ahí más de seis meses!”
No hay preguntas sobre el asunto. Los desechos que hoy afean el entorno y contaminan el ambiente no llegaron allí de la nada, y quienes reclaman… también son responsables.
La dirección municipal del Citma asegura que no es solo en áreas próximas a La Quintica, y alerta acerca del sistema de recogida de desechos sólidos de la localidad. Sin embargo, llama a la conciencia de los lugareños que, en ocasiones, depositan la basura fuera de los lugares identificados para eso.
Trabajar para el futuro
En el Paisaje Protegido Valle del Ariguanabo, al amparo de las autoridades del Partido y el Gobierno, preparan proyectos para recuperar el entorno. No esperemos una tarea fácil; lo que se planea es inmenso, pero el futuro se sueña así, a lo grande, o no se sueña.
Hemos de rescatar este pedazo de río que nos ha regalado más que bienestar económico, identidad y cultura. Podemos hacerlo también desde el marco legal.
Reunirse con los vecinos, hablar, crear condiciones para recoger o reciclar la basura, es también una manera de proteger el medio ambiente y trabajar para el futuro.