Cuando comenzó el estremecimiento generado por la crisis sanitaria de la COVID-19, se convocó a un gran aviso humanitario. Era el momento de mostrar la solidaridad y la dignidad humana, cuando las desigualdades se agudizaban. Entonces, el proyecto Paloma se convirtió en oído ante los problemas de una sociedad en confinamiento.
Su empeño propició que la subdirección de Asuntos Humanitarios de la Oficina del Historiador de La Habana entregara un donativo de coches especiales a cinco niños artemiseños con discapacidad cerebral y físico-motora.
Aun cuando no alcanza a satisfacer la demanda de tales artículos, representa una ayuda incalculable para esos infantes y sus familias.
Así lo reconoció Ydalmis Chiles Pérez, madre de una niña aquejada de síndrome Down. Según afirmó, el donativo encierra una gran significación para el cuidado de su pequeña, quien ha recibido siempre una esmerada atención por parte del personal de la Salud y otras instituciones.
Olga Luisa García García, coordinadora del Proyecto Paloma en la provincia, asegura que cualquier iniciativa que contribuya a reducir las vulnerabilidades de los niños con discapacidades, es un acto de infinito amor.
El Proyecto Paloma pretende ayudar a todas las personas que han necesitado construir o reconstruir sus proyectos de vida, independientemente de sus afecciones o singularidades.
Muy bueno yo tengo un niño d 16 año discapacitado motor q necesita de un triciclo para moverce de un lugar a otro si hubiera la posibilidad de adquirir alguno pues el q tiene ya no le sirve lo tiene desde q estaba en primer grado y ya esta en 10 el el pree de aquí de guanajay yo vivo en ave 59 #5005 entre 50 y 52 pudiera entregar el q tengo a quien le haga falta sin problema si gracias