Con la premisa de que para evitar el derramamiento de una gota de sangre hay que derramar ríos de sudor, como sostuviera el General de Ejército Raúl Castro Ruz, unidades de la Región Militar Matanzas continúan su preparación para la defensa.
Así se confirmó este lunes durante el ejercicio táctico de compañía reforzada de una unidad de infantería, en el cual participaron más de 400 efectivos y una gran cantidad de medios, como unidades de tanques, artillería terrestre y de la defensa antiaérea, tropas especiales, la aviación y la Marina de Guerra Revolucionaria.
Uno de los objetivos fundamentales de dicho entrenamiento, que tuvo en los jóvenes a sus principales protagonistas, es consolidar el nivel de preparación y de disposición combativa de nuestros combatientes, quienes están decididos a defender su Revolución a cualquier precio, comentó el coronel Javier Pérez Zayas, jefe de la unidad de infantería de la región militar Matanzas.
Además de fortalecer lo aprendido, dijo por su parte el mayor Daniel Medina, el ejercicio sirvió para incrementar la cohesión de los órganos de mando en la conducción de las acciones combativas y ejercitar a los cuadros y a las tropas en las acciones contra un enemigo que no cesa en su criminal bloqueo y en sus constantes amenazas y provocaciones.
Durante el desarrollo del ejercicio se llevaron a cabo diversos episodios, entre los que destacaron las acciones contra el desembarco naval y aéreo, las emboscadas de contención, el asalto secreto de las fuerzas especiales y la organización de la defensa, entre otros.
Al término de la jornada, los jóvenes combatientes Ayanna Sánchez Sánchez, oficial de la defensa anti aérea, y Leonardo Balboa Heredia, quien cumple su servicio militar activo, afirmaron estar dispuestos a no dejar mancillar la Patria y coincidieron en que en suelo cubano no habrá nunca espacio para la rendición.
Aquellos que pretenden fomentar la subversión en Cuba y quieren un «cambio de régimen» tendrán en la juventud revolucionaria, comprometida con su pueblo y su Revolución, un hueso duro de roer. Por eso, para fortalecer nuestra capacidad de respuesta, seguimos preparándonos, aseguró Ayanna.