El molino de arroz de la Unidad Empresarial de Base Mártires de Artemisa es el único para tal fin en la provincia. Además de molinar el grano seco, consolida un área para el autoabastecimiento y comercializa subproductos derivados del proceso productivo.
La UEB situada en el asentamiento Ciudad Industrial pertenece a la Empresa Agroindustrial de Granos José Martí, ubicada en Candelaria. Produce arroz consumo con destino a la canasta familiar, así como harina de este cereal y comercializa la cáscara del grano, utilizada en la cría de aves y cerdos.
Según Raúl Rodríguez Díaz, director de la UEB, en 2020 contrataron la venta de cáscara de arroz (o paja), que antes se desechaba, con la Empresa Avícola de Artemisa, la de Flora y Fauna y varias unidades agropecuarias militares (UAM) por un valor de 12 pesos el metro cúbico.
Hasta el viernes 10 de septiembre, habían comercializado 82,9 toneladas de polvo de arroz, 1 250 metros cúbicos de paja o cáscara, 115.28 de harina de arroz y vendieron 699.6 toneladas de arroz al Mincin.
La producción de harina sustituye importaciones. Inició en 2020, pero fue este año que —tras el ajuste de la máquina para este objetivo— lograron un producto con la calidad requerida, demandado por la Empresa Provincial de Producciones Alimentarias y Artí-culos Varios, la UEB Esazúcar, de la Empresa Azucarera Artemisa y la industria pesquera de Pinar del Río.
El presente de cuatro décadas
El molino artemiseño tiene cuatro décadas de historia. En sus inicios contaba con silos para secar el arroz; hoy los utilizan para almacenarlo. Luce nuevos viales de hormigón que soportan altas cargas y una moderna pesa electrónica de 80 toneladas (antes de 30), la cual permite mayor control de la entrada y salida de materias primas y producciones. Las inversiones en viales y la pesa fueron ejecutadas entre 2020 y 2021.
Se les suman los trabajos para conectar una batería de cuatro silos modernos al molino que sustituye los antiguos, pero está detenida por el impacto de la COVID-19 y la falta de piezas importadas, sostuvo el director de la UEB.
Dijo que el molinado comenzó en junio, con interrupciones por los cortes de electricidad debido a la situación energética del país. El año pasado produjo 1 702.3 toneladas de arroz consumo, de 1 560 previstas; la meta en 2021 asciende a 2 900, más 100 de harina. Lograron el 66.6% de rendimiento industrial establecido y producirán arroz para el turismo.
Experiencias a considerar
El período de enero a mayo de 2021 marcó un hito en la UEB, pues se reinstaló la máquina de harina de arroz ajustada, se conectó una torva a la torre clasificadora para mejorar su eficiencia y se sustituyó el antiguo compresor por otro de mayor potencia, que también aumenta la eficiencia del ensaque, la limpieza del grano e higiene de la industria.
Durante los cinco primeros meses del año comenzaron a producir carbón vegetal destinado a la exportación, con una brigada de cuatro hombres y un plan de 11 toneladas para el año, destacó Raúl Robaina Díaz, jefe de turno de molinado.
“Tenemos más de tres toneladas en beneficio, y resulta una actividad que, además de mejorar el salario de los trabajadores, favorecerá adquirir piezas importadas que requiere la industria”.
Para Ángel Hernández Izquierdo, jefe de producción, el Mártires de Artemisa es más que un molino: en unas cinco hectáreas de tierra producen pepino, habichuela, yuca, maíz, ají, tomate, huevos, carne de cerdo, conejo y aves a fin de abastecer al comedor y la venta a los obreros, una tarea que inició en 2020 con tres trabajadores y el apoyo del resto cuando los convocan.