Convidando a generar vida desde un encuentro con las artes, en tiempos de COVID-19, surge la acción comunitaria ConVidArte, una propuesta de la Casa de Cultura de Cabañas Celia Sánchez Manduley.
“Dirigida a todos los grupos etarios, constituye la forma distinta, directa y creativa que exige el momento de llegar a la población, siempre teniendo en cuenta las medidas higiénico sanitarias establecidas”, puntualiza Esperanza Díaz, directora de la referida institución cultural.
“Debíamos hacer algo nuevo. Para las artes plásticas que tanto movilizan y perduran, apenas disponíamos de recursos. Pensamos entonces en conferirle vida a las cosas, de una manera simple, de modo que el único costo fueran la entrega y el amor”, sostiene.
De esa forma, los artistas se empeñaron en la búsqueda de diferentes soportes que, aparentemente, han cumplido su vida útil, para dar rienda suelta a sus creaciones. Como resultado, botellas, tejas, placas de acetato y recortes de tela “se convierten en bellas y originales obras de arte.
“Todas llevan impregnado un sello de nuestra identidad, de nuestra cubanía. La aceptación ha sido maravillosa”, asegura Díaz. También se sumaron al proyecto destacados solistas vocales de la comunidad, declamadores y una pareja de baile.
El 8 de marzo fue la primera presentación en la Casa de Cultura, ante un público bien reducido. Luego, en vísperas del Día de las Madres, desplegaron nuevas propuestas, al interrelacionar las diferentes manifestaciones artísticas. Y, durante el proceso de vacunación, ConVidArte ha sido esencial para contribuir al bienestar de quienes asisten a los centros habilitados en el consejo popular Cabañas.
“Utilizamos el arte a partir de su valor terapéutico, de manera tal que las personas logren relajarse, se sientan bien y disfruten del momento. Hemos pensado bien cada propuesta: hacemos uso de la sonoterapia y seleccionamos minuciosamente la música adecuada, videos instructivos relacionados con el enfrentamiento a la pandemia, historias de Chamaquili y materiales humorísticos, entre otros.
“Este afán ha encontrado sus principales hacedores en los artistas de la plástica Nemesio Omar Lafferte y Joan González, así como en Yusimí Pérez, Miraida Hernández, Marilín Vázquez y David Cuéllar; metodóloga de creación, programadora, bibliotecaria y operador de audio, respectivamente, de nuestra Casa de Cultura”, agrega.
“Hay un antes y un después del proceso de vacunación; ha representado un acontecimiento muy significativo en la historia de nuestro pueblo. Para la administración de la tercera dosis, ConVidArte se vistió de gala y regaló una exposición de artes visuales, mediante la cual diferentes placas de acetato reflejaron lugares patrimoniales del imaginario popular de la localidad. Nuestra máxima inspiración es y será siempre el pueblo de Cabañas”.