Mi bebé tiene 18 meses y seguimos lactando; sin embargo, no pocas veces he escuchado frases como: ¿todavía mama?, ¿no lo has destetado?, esa leche es agua y tantas otras que dan vergüenza ajena. La ignorancia y la desinformación reinan sin ton ni son.
Aunque en nuestro país durante el embarazo las madres reciben clases al respecto, conozco quienes instan a abandonar la lactancia ante cualquier dificultad o introducir alimentos antes de los seis meses de vida.
La OMS y otras organizaciones de la salud la recomiendan como único alimento hasta los seis meses de edad, y luego complementarla con otros hasta los dos años, como mínimo.
Anabel González Valiente continúa lactando a su niña Sofía, ya de cuatro años. Pero esta mamá artemiseña ha sufrido discriminación en carne propia.
“El mayor problema ha sido el rechazo social y profesional, debido a prejuicios o desconocimiento de la evidencia científica actual. Esto es lo mejor para mi niña, y trato de que no me afecten los comentarios negativos; no obstante, a veces puede ser difícil de ignorar”, explica.
“Pertenecer al grupo de apoyo de la Liga de la Leche en Cuba (LLC) me ayudó a sentirme segura en mis decisiones. Compartir con otras mujeres amamantando a niños mayores ha sido de mucha ayuda”, manifiesta.
Precisamente, del 1 al 7 de agosto se celebra la semana mundial de la lactancia materna, centrada en evitar la discriminación de las madres lactantes en todos los ámbitos, con apoyo familiar y comunitario.
El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, la Organización Panamericana y la Mundial de la Salud, así como los médicos cubanos, otorgan vital importancia a amamantar; incluso recomiendan no separar del bebé a la madre enferma de COVID-19.
“La leche materna no constituye una vía de transmisión del virus”, sostiene el doctor Pablo Roque, coordinador nacional del Programa de Lactancia Materna y Bancos de Leche Humana del Programa de Atención Materno Infantil, en un artículo publicado en el sitio oficial del Ministerio de Salud Pública.
“El destete no es recomendable. Al quitarle el pecho al bebé, lo coloca en desventaja al infectarse con el SARS-CoV-2, causante de la Covid-19, u otras enfermedades”. Lo atestigua Lisbet del Carmen Pacheco, quien forma parte del grupo de LLC y cuenta cómo permaneció con sus dos hijos durante la enfermedad.
“Todos dimos positivo, excepto los niños. Yo los amamanto a ambos: el mayor tenía dos años, y seis meses el pequeño (hacemos lactancia en tándem). Ese primer PCR de ellos resultó negativo. Pero cuando yo di positivo, ellos eran contacto directos; entonces, nos trasladaron al hospital pediátrico de Manzanillo para repetirles el PCR… y una vez más fue negativo.
“En un primer momento la intención era separarnos, para prevenir el contagio”. Por petición personal se negó a ser separada de sus hijos, y continuó amamantando. Sus niños nunca dieron positivos.
Recientemente, José Ángel Portal Miranda, ministro de Salud Pública, anunció el comienzo de la vacunación con Abdala a las madres que lactan una información muy esperada.
En mi experiencia materna he chocado con infinidad de mitos sobre la lactancia; de todos modos, pienso continuar, porque los beneficios son infinitos. El destete natural será la opción más viable y menos traumática; mientras, haré oídos sordos e ignoraré miradas indiscretas.
Desde ya compruebo los beneficios infinitos de la primera “vacuna” recibida por mi bebé, y vivo feliz. Con esta recibe anticuerpos, así como todos los nutrientes, vitaminas y minerales necesarios. Además, confío en la ciencia cubana: muy pronto podrá recibir Abdala; entretanto, está protegido por mí.
Beneficios de la lactancia
- La lactancia materna protege al bebé de gastroenteritis, infecciones de las vías respiratorias, otitis, infecciones urinarias y otras.
- Protege frente al Síndrome de Muerte Súbita del Lactante.
- Evita el desarrollo de enfermedades inmunoalérgicas como el asma, enfermedades inflamatorias crónicas del intestino, diabetes mellitus tipo I y algunos tipos de cáncer.
- Hace más rápida la recuperación después del parto a la madre, y le reduce el riesgo de padecer cáncer de mama y de ovario.