En esta lucha por la vida, también cuenta el desprendimiento de recursos materiales que llegan para dar una luz esperanzadora a aquellos lugares que se enfrentan de manera directa a la COVID-19.
Creadores del Fondo Cubano de Bienes Culturales UEB Artemisa, hicieron llegar una carga de amor al Hospital Pediátrico José Ramón Martínez, de Guanajay, donde se atiende un elevado por ciento de los niños artemiseños detectados con el SARS-CoV-2.
El donativo llevó tres camas cameras para que los médicos puedan descansar, cómodamente, en el poco tiempo que les quede disponible. También se compone de módulos sanitarios con blusas, pantalones, gorros y nasobucos, así como artículos para el aseo de la instalación, entre ellos, escobas, haraganes y cubos plásticos.
Al hacer la entrega, Lázaro Jesús Hernández, director de la UEB, destacó la valentía del ejército de las batas blancas, que lleva una lucha con el poderoso virus, tratando de salvar a sus pacientes, a veces, con un mínimo de recursos, por eso, dijo “nuestros creadores hacen esta entrega que resulta poco para todo lo que ellos necesitan y merecen”.
Por su parte, el doctor Reinaldo Guerra, especialista en MGI del policlínico de Guanajay, agradeció el donativo que llega en un momento oportuno. Dijo que “cada ayuda es una luz que les indica el camino para seguir en la pelea, para seguir ayudando a los enfermos”, y agregó, “que hacer el bien es parte de la formación de los médicos cubanos que nunca retroceden a sus principios, aún, en momentos tan complejos como los que se viven hoy”.
El Fondo Cubano de Bienes Culturales UEB Artemisa, ha respondido con anterioridad, haciendo oportunos donativos a entidades de Salud de la provincia, a hospitales como el Ciro Redondo y el Iván Portuondo y a zonas específicas como el grupo de pesquisaje del reparto Toledo en la capital provincial.
Desde el inicio de la pandemia, sus creadores, sin contabilizar gastos, abren su corazón para apoyar en esta lucha por la vida.