Orlando Galán Betancourt: Un guajiro que asaltó la historia
Nació el 6 de Febrero de 1927 en Las Cañas, Artemisa y fue el tercero de los ocho hijos del matrimonio campesino de Fermín Lorenzo y Agustina, sus padres. Asistió poco a la escuela, pues la comenzó tarde y no pudo cursar luego el sexto grado.Tuvo que comenzar a trabajar para ayudar a su familia, en labores del campo, en una fábrica de almidón, en el picadero de piña y en la fábrica de conservas.
Tras el golpe de estado de Fulgencio Batista, el 10 de marzo de 1952, su familia pasó aún más necesidades. Entonces es que su hermano Roberto y su amigo Ricardo Santana, lo ponen en contacto con José “Pepe” Suárez, quien a su vez estaba en contacto con Fidel en la preparaciónde una acción armada contra la dictadura.
Desde su entrada al Movimiento, Orlando participa endistintas acciones como preámbulo al gran golpe.Prácticas de tiro, tanto en la Universidad de la Habana como en fincas de Artemisa, la primera Marcha de las Antorchas y la peregrinación a la tumba de Eduardo Chivas; así como en otras actividades orientadas por Fidel.
El 23 de julio de 1953 recibe la orden para partir hacia Oriente al día siguiente. Tras partir bien temprano llega en la madrugada a la granjita Siboney, donde Fidel se reúne con los hombres y les explica el plan de la acción que van a realizar.
A Orlando se le ordena ir en el auto número cuatro, el cual conducía Ciro Redondo y debía atacar por la posta 3 del Cuartel Moncada. Al fracasar la acción es uno de los 20 que logra regresar a la granjita Siboney y desde allí, por orden de Fidel, parten hacia las montañas con la idea de retomar la lucha en esos terrenos.
Luego de varios días de intenso hostigamiento del enemigo, casi sin comida y con varios heridos a cuestas; Fidel decide disgregar la tropa en pequeños grupos de dos o tres compañeros. Orlando, su hermano Roberto y Ricardo Santana, forman uno de esos grupos y logran cruzar el cerco de los soldados batistiano esa misma noche.
Tras unos cinco días de caminata llegan a la finca de Efraín Zamora y su esposa María Acuña, quienes los mantienen escondidos por unos tres meses. Tras otros meses más ocultos en la propia casa de Efraín, este lleva a Orlando para Santiago de Cuba, e incluso le da trabajo.
Allí estuvo hasta mayo de 1955, cuando la dictadura, producto a la presión popular, decretó la amnistía. Entonces Orlando regresa a Artemisa, donde sufre varias detenciones y maltratos hasta el Triunfo de la Revolución.
Un nuevo comienzo
Con el triunfo revolucionario, vino un nuevo comienzo para la gran mayoría de las familias cubanas, por su puesto también para aquellos valientes asaltantes al Moncada. Desde enero de 1959, Orlando se puso nuevamente al servicio de la naciente Revolución.
Primeramente se unió a la nueva Policía Nacional Revolucionaria, y luego pasó a ocupar responsabilidades dentro de la economía. Dio el paso al frente para luchar durante la Crisis de Octubre y regresó al Ministerio del Interior hasta 1972. Después ocupó diferentes responsabilidades en diferentes puestos asignados.
Este distinguido asaltante al Cuartel Moncada, integrante de la Juventud Ortodoxa, combatiente de la lucha clandestina, falleció el 31 de diciembre de 1999, como consecuencia de un infarto cardíaco.
Fue uno de aquellos valientes jóvenes artemiseños, junto a su hermano Roberto, que dieron el primer paso para acabar con la dictadura de Batista. Fue Sepultado en el Panteón de las FAR en la necrópolis de Colón el 1ero de enero del 2000.
Durante su fructífera vida recibió condecoraciones por sus actos como la condición de Fundador del Partido Comunista de Cuba, la Medalla del XX Aniversario del Moncada, Medalla de la Lucha Clandestina; y las Medallas por el XX, XXX y XL Aniversario de las FAR.