En el corazón de Caimito, a menos de 15 metros de la Secundaria Básica municipal, de la escuela primaria Juventud de Acero, del círculo infantil no estatal Los Buhitos y de uno de los complejos más grandes de edificios en este municipio (cuatro bloques con casi un centenar de apartamentos) se desborda el caudaloso “río” albañal más aterrador que recuerde en este, mi pueblo.
Una de las calles caimitenses más transitadas, sobre todo después del establecimiento de la línea ferroviaria que nutre de provisiones vitales a la capital y otras provincias, se ha visto afectada por una despampanante avería en las redes hidráulicas, que solo parece sensibilizar a la comunidad que le rodea y aqueja.
Nadie parece conmoverse con tan penosa situación; es un horror el verse inmersos –en contexto de COVID- asfixiados por la epidemia de la inconsciencia, que pareciera una escena de ficción o surrealista.
A casi dos meses de publicada la evidencia fotográfica en nuestra sección La foto de Hoy -de aspecto no tan preocupante como en el presente- con fecha 6 de abril de 2021, y a tres años de la primera denuncia –solucionada temporalmente- en El pueblo Opina de este semanario, la comunidad en pleno exige ayuda y atención: sus derechos.
Elsa Emilia Sosa Amador, coordinadora de los CDR en la zona, una septuagenaria respetada en su barrio y remitente de la susodicha queja en el artemiseño titulada Registro desbordado, precisa respuestas, con fecha 27 de marzo de 2018, vuelve a nosotros con preocupaciones que ya yo venía previendo antes de nuestro diálogo, justamente porque afectan a más de uno en este territorio.
En mi afán de conseguir alguna respuesta intenté en vano comunicarme con las instancias que entendí podían encausar mis interrogantes.
Entonces, luego de probar por diferentes rutas, hablé con Liena Castro Leiva, directora de Acueducto y Alcantarillado en el municipio, quien declara tener absoluto conocimiento de la situación en calle 53, entre 38 y 40, incluso de haberle dado el seguimiento que le compete.
Ella alega que, al existir un solo carro de bombeo de alta presión para toda la provincia Artemisa, se ha dificultado darle solución, ya que hay un sistema que prioriza, según la gravedad de la rotura, uno u otro caso. Además, cuenta que diariamente esto se ha reportado, puesto que es un problema al que no han conseguido darle vía de manera manual, sino que se precisa la acción del camión para una solución definitiva.
Pero, ¿está Caimito en alguna lista, que al menos nos reporte una esperanza para más tarde o más temprano toparnos con el único vehículo capaz de evitar tales molestias?
Aun así resultó un poco escurridiza la recopilación de información, en el resto de las instancias que pretendí me atendieran; quizá porque no habría que llegar a estos términos, sino que la solución era menos barroca de lo que aparentaba.
Me siento en el compromiso de instar a cada organismo y las autoridades estatales a que se centren más en el enfrentamiento práctico de las dificultades en nuestro río albañal; a deponer el manto burocrático; a involucrarse a conciencia con la gente que, a fin de cuentas, es a quienes nos debemos.
No creo que sea tiempo de invertir nuestras energías en justificar ciertos eventos o contratiempos, sí en darle más de frente, para topar con las soluciones.
Saludos Isabel desde un pueblo de Villa Clara,creo que por todo el pais veras esas imagenes,hace unos años Cienfuegos llego a ser la ciudad mas limpia del pais pero ya no lo es,y sin embargo a comunales se le siguen asignando recursos para estas cosas,ni idea de como los manejan.