Fue como llegar a un extraño sitio, en medio de esta vida tan agitada. Todo era risa y color. Las preocupaciones quedaron del otro lado de la cerca. Y el peligro del coronavirus solo alcanzó a cubrir el movimiento de los labios, pero no el brillo de sus ojos. Entre palmas y canciones las educadoras moldean “la esperanza del mundo”. En un gesto de reciprocidad, los niños las ven “como cosa de su corazón”.
Desde su creación el 10 de abril de 1961, los círculos infantiles tienen un objetivo bien definido: desarrollar al máximo las potencialidades de los niños en edad preescolar y, a la vez, cuidar a los hijos de las madres trabajadoras.
También desde los inicios quedó establecido que, en esas instituciones, los pequeños debían ser atendidos de manera ordenada y personalizada, sentir el calor y el amor mismo de la madre que los cuida, los protege y los forma en los más puros sentimientos y valores.
El futuro se forma aquíBien conoce sobre esta sensación Marta Ortega Reyes, quien se desempeña como metodóloga integral de la Primera Infancia, con una vasta experiencia en la educación infantil en Güira de Melena.
Atesora los días en que preparaba cada detalle antes de la inauguración. Aquellas manos darían forma y sentido a un inmueble hecho para dar y recibir amor.
“Algunas participamos en la construcción de estas paredes. Otras cosían el avituallamiento y preparaban materiales didácticos. Además, intercambiamos sobre el proceso de enseñanza y aprendizaje con educadoras de más experiencia. Y, en las noches, yo asistía al curso de directoras de círculos infantiles, a la par de la licenciatura.
“Así, ante la presencia de nuestra querida Vilma Espín, el 13 de marzo de 1990 quedó inaugurado el círculo infantil Nené Traviesa”, hasta hoy referente de la educación en edades tempranas en el territorio y el primero del municipio en aplicar el Tercer Perfeccionamiento del Sistema Nacional de Educación.
Primero como su directora y luego como metodóloga, Marta ha vivido el perfeccionamiento de este programa educativo.“Los círculos infantiles han favorecido la integración plena de la mujer a la sociedad, y han desempeñado un importante papel en la formación de los niños desde las edades más tempranas.
“Son sorprendentes los conocimientos, hábitos y cualidades que adquieren, a través de las diferentes áreas del desarrollo. Por supuesto, igual nuestros docentes se han superado: algunas con categoría de Máster en Ciencias de la Educación son responsables de nuestros salones.
“También la vinculación de los centros con la familia y la comunidad, ha aumentado”, señaló.
Sensibilidad acentuada
Grisel Nazco Cardelle dirige el círculo infantil Nené Traviesa hace nueve años. La acompañan en esta obra 53 trabajadores, de ellos 32 docentes, distribuidas en los diferentes años de vida. Primero como auxiliar pedagógica y maestra, más tarde en cargos de dirección, reconoce un ele-mento capaz de hacer su profesión tan especial: el amor por los niños.
“No te puedes dedicar en cuerpo y alma a esta carrera, si no sientes por ellos”.
Esa sensibilidad se reviste de abnegación, y la llevó en los momentos más difíciles de la pandemia a no abando-nar, a compartir —junto con los abrazos de su nieta— el calor de los niños cuyos padres desempeñan labores con una alta repercusión en el escenario económico y social.
“Si bien la COVID-19 entraña un desafío, nuestras ins-tituciones se caracterizan por ser seguras”, afirmó. Desde el surgimiento de estos planteles, el trabajo de Salud fue vital para cuidar de los niños y del personal que los atiende, una prioridad agigantada ahora.
Cobra un valor fundamental la pesquisa diaria en la entrada de la institución, la desinfección de manos, el uso del nasobuco y el cambio de la prenda varias veces, así como el distanciamiento físico en cada actividad.
Tanto Marta como Grisel han marcado la vida de gene-raciones de niños en esos salones, y esos peques han dejado huellas de amor en sus almas de nobles educadoras.
Este 10 de abril, cuando se celebra un año más de la epopeya impulsada por nuestra heroína Vilma Espín, Cuba vuelve a mostrar las bondades de su sistema social y su apoyo incuestionable al ser humano.