El humorista y trovador cubano Alejandro García Virulo compuso una canción relacionada con la COVID-19 y lo que vivimos por estos días. Es una propuesta para entretener y hacer reír. Estuvo acompañado por el Septeto Nacional Ignacio Piñeiro, en coproducción con la EGREM y los Estudios Animados del ICAIC.
Dale candela
El murciélago es un bicho
que vuela en la oscuridad.
Por eso la gente piensa
que está lleno de maldad.
Los gringos cuando lo vieron
en Batman lo convirtieron,
en Drácula los rumanos
y en vampisol los cubanos.
Pero resulta que un tipo
que pensaba diferente
al murciélago lo echó
en una sopa caliente.
Sospechan de allí salió
este virus condenado,
pues dicen que el animal
no estaba bien cocinado.
Dale candela, dale candela,
dale candela para que el virus se muera.
Yo pienso que Donald Trump,
que aquí nos tiene bloqueados,
es mucho más peligroso
que un murciélago estofado.
Con ese desinfectante
que quiere darle a su gente,
por qué no se inyecta él
con cloro y con detergente.
Dale candela, dale candela,
dale candela para que el virus se muera.
Yo sí tengo que cuidarme
de este virus tan funesto
porque en la tercera edad
ya no hay piezas de repuesto.
Me quedo en mi apartamento
mientras la pandemia pasa,
y los muchachos del barrio
me traen comida a la casa.
El doctor de la familia
viene con una enfermera,
y me dan unas goticas
que de verdad están muy buenas.
Yo me siento un muchachón
cuando esa enfermera viene;
por eso como un cañón
salgo a aplaudir a las nueve.
Dale candela, dale candela,
dale candela para que el virus se muera.
Oiga, compadre,
no sea farruco:
quédese en casa
y póngase el nasobuco.