Los Celtics de Boston son el equipo más exitoso de la historia del mejor baloncesto del mundo, el de la NBA (Asociación Nacional de Blaoncesto, según sus siglas en inglés). Sus 17 títulos avalan ese calificativo, y hay dos nombres claves en ese número, Bill Russell y Larry Bird.
Al primero le dedicaremos otro de nuestros espacios pues hoy queremos reverenciar a uno de los más grandes basquetbolistas de todos los tiempos. Larry Joe Bird nació el 7 de diciembre de 1956 en Alabama, Estados Unidos y fue la gran figura de los Celtics ganadores de tres campeonatos en los años 80.
Llegó a la NBA, cuando los verdes de Boston lo eligieron en el draft de 1978 y el impacto del nuevo alero fue inmediato, la temporada siguiente (1980) lograron 61 victorias y 21 derrotas, tras solo ganar 29 juegos en año anterior. Apenas en 1981 llegó a su primera final y también obtuvo el título al derrotar a Houston Rockets.
En ese momento comenzaría una de las grandes rivalidades de la NBA, Bird versus Earvin “Magic” Johnson, la cual venía desde su época en la universidad. Y rejuvenecería a la NBA, una liga en horas bajas debido a sus preocupantes índices de audiencia.
Magic y Bird se enfrentaron en tres finales durante esa década, y aunque Bird solo pudo salir victorioso una vez en 1984, ganó en 1986 su tercer anillo, otra vez ante los Rockets.
El alero de 2,06 metros, formó junto con Kevin McHale y Robert Parish uno de los mejores tridentes[6] de la historia de la NBA. Dicho trío es el segundo con más victorias de temporada regular en la historia (540)[8] detrás de los históricos de San Antonio, Tim Duncan, Tony Parker y Manu Ginobili.
Tras sus 13 años en la NBA, Larry Bird es considerado por muchos como el mejor alero en la historia de la NBA y una de las más grandes figuras del baloncesto mundial. Fue incluido en el Mejor Equipo de la Historia del 50 Aniversario de la NBA en 1996,[9] así como en el Salón de la Fama del Baloncesto en 1998.[10] También apareció en el mejor quinteto de la NBA en nueve temporadas, de las que fue el Jugador más Valioso tres años consecutivos entre 1984 y 1986
Se retiró en 1992 tras ganar el título olímpico en Barcelona con el Dream Team debido a sus problemas crónicos en la espalda. Luego ejerció como entrenador de los Indiana Pacers durante 3 temporadas y desde 2003 otros cargos de dirección. Es la única persona en la historia de la NBA en ser nombrado Novato del Año, Jugador más Valioso, Entrenador del Año, y Ejecutivo del Año.